​¡Auxilio!

¡Auxilio!

Villarán se quedó más fría que un helado cuando, durante su exposición en el marco de la Cumbre de los Pueblos, aparecieron dos sujetos con una pancarta que le recordaba las muertes en el desalojo del exmercado La Parada. La doña se quedó 30 segundos sin habla.

¿Quién podrá defenderla?

Tanta fue su incomodidad y rabia, que al rato se retiró haciendo gestos de fastidio y refunfuñando junto a gente que la acompañaba, dejando en el escenario al invitado de honor, el alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, ¿Y dónde estaba Susel Paredes, la Chapulina Colorada?

No se oye, madre

Y cuando le preguntaron sobre la denuncia contra su hermano, se apoderó de Villarán una repentina locuacidad solo comparable con la de Castañeda. Se quedó muda.

Riesgo

Más tarde, Villarán lamentaba que la intolerancia y la violencia verbal se hayan adueñado de la Cumbre de los Pueblos. A este paso, cada evento al que acuda la alcaldesa podría ser calificado por Urresti como “de alto riesgo”.

¿Curioso?

Cuentan que mientras se realizaba el conteo de votos de la segunda vuelta electoral en Pasco, habría llegado al local de la ODPE el congresista Néstor Valqui. ¿Se le había perdido algo o intentaba inclinar la balanza hacia el lado de la mesa fujimorista?

Vestido para matar

Valqui vestía una casaca color naranja, que identifica al candidato Teódulo Quispe, de Fuerza Popular, lo que generó incomodidad incluso entre funcionarios de la entidad electoral.

Ardió Troya

El lío estalló cuando el representante del partido rival, Pasco Verde, Lorenzo Rodríguez, denunció que el fujimorista no podía entrar en un local donde solo podían estar personeros. Ello precipitó una bronca entre simpatizantes rivales y la seguridad del legislador.

El Cateriano

Tras la destitución de la procuradora Vilcatoma, el ministro Cateriano salió con todo. “Si la Vilcatoma pensó que el ministro Figallo actuaba al margen de la ley, debió haber solicitado la acción de un juez”, escribió en Twitter. ¿“La” Vilcatoma, dijo? Parece algo personal.

Luz verde

Sus comentarios, a través del Twitter, no pasaron desapercibidos, pues fueron aprovechados por diversos cibernautas que le recordaron un vergonzoso audio en el que resultó involucrado. “¿Ya le dieron luz verde para atacar a la procuradora?”, le preguntaron algunos.

Casual encuentro

Todavía se sigue hablando del casual encuentro entre la cúpula aprista (García, Mulder y Velásquez Quesquén) y la familia presidencial (Ollanta, Nadine e hijos) en la miraflorina Tiendecita Blanca.

Asediado

El flamante procurador anticorrupción, Joel Segura, el mismo que habría respaldado a la destituida Vilcatoma, estará hoy en la Diroes para sustentar los alegatos finales en el caso “diarios chicha”. Seguro que será más asediado que Margarito Machahuay.