Ring, ring...

La versión más certera sobre por qué fue posible la captura de Martín Belaunde Lossio la confirmó ayer el diario La Razón de Bolivia, que explicó que, en efecto, un aspecto clave fue el rastreo de dos llamadas que el prófugo hizo desde su fuga.

Se acabó la paz

Sorprende la impericia de MBL en estas circunstancias, porque las dos llamadas no eran necesariamente indispensables. Una fue al programa de Milagros Leiva y la otra al abogado brasileño Fernando Tiburcio, al que contactó en busca de supuesta ayuda para sus familiares en La Paz.

“Valdazo” de agua fría

Decimos “supuesta ayuda” porque además MBL habría sondeado a Tiburcio para que lo asesore en su nuevo periplo en Brasil. Aunque después del modo en quedó Jorge Valda -su abogado, detenido por ayudarlo-, cualquiera tendría que haberlo pensado dos, tres o cuatro veces.

Estuvo cerca

Según La Razón de Bolivia, MBL iba a salir en una avioneta y todo estaba listo, pero para el momento del vuelo, el mediodía del martes 26, el prófugo estaba cercado y no podía aproximarse a la nave sin correr el grave riesgo de ser detenido.

El último pasajero

A tal punto fue así, que el piloto de la aeronave le pregunta al enlace de MBL, Rodrigo Quispe: “Señor, falta un pasajero, ¿vamos a partir?”. El pasajero que faltaba era Martín Belaunde Lossio, que allí perdió su gran oportunidad de huir a Brasil.

Ahora o nunca

Siempre según el serio diario boliviano, MBL escapa de la casa del “Curaca Blanco” el sábado a las 11 y 30 de la noche, pero la persona que tenía que esperarlo no estaba. Por eso toma un taxi hasta Villa Fátima y de allí se embarca a Caranavi (Yungas), donde lo esperaba Quispe.

Fierro a fondo

En Caranavi, Belaunde y Quispe toman un servicio de transporte público llamado “rapiditos”, similar a los colectivos que existen en Lima. Así, llega a Trinidad la noche del domingo y a Magdalena a las cuatro de la madrugada del lunes.

Torpeza satelital

En Magdalena, MBL se habría alojado primero en un hostal y recién a las 10 de la mañana se escondió en la casa donde lo hallaron, que era de la hermana de Quispe. Ya en la zona, confiado, compra un celular desde el que hizo las llamadas que fueron su Waterloo.

Le salió caro

Al día siguiente, el martes, se entera de que los dos accesos a la zona de salida de las avionetas ya estaban controlados por las fuerzas del orden y no le queda otra que abortar su viaje. Ya capturado, MBL narró a la Policía que su fuga le había costado alrededor de $300 mil.

Víctimas de MBL

Como se sabe, las víctimas de Rodolfo Orellana han formado una asociación en el Perú, pero en Bolivia MBL ha causado tantos perjuicios y comprometido a tantas personas que estas bien podrían hacer lo propio.

Hagan su colita

El fiscal interventor de La Paz, Paul Franco, informó que un grupo de fiscales de Bolivia vendría a interrogar a MBL, que va a tener en estos días una agenda recargada. También lo quieren “visitar” las comisiones Áncash y MBL, así como el fiscal del caso, Elmer Chirre.

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