¡Bien taipá!

Una ronda de tipakay y chijaukay bien taipá sirvió ayer un camarero del Chifa Royal para los comensales que reservaron un privado allí. “Han pedido que nadie los interrumpa, yo los he visto en la tele”, le dijo el mozo al de la cocina.

Tres tristes tigres

Sucede que en ese privado estaban nada menos que los protagonistas de la reciente crisis palaciega, Gilbert Violeta, Pepe Labán y Jorge Villacorta, analizando la coyuntura “post gorgojo” que tanto dio que hablar en los últimos días.

Las cosas claras

Quedó claro al interior del grupo oficialista que fue un congresista de PPK el que filtró el mensaje de Telegram que puso en aprietos a Violeta, y no un colaborador o trabajador de la bancada, como dijo Heresi. Veremos si Bruce da con el Judas.

A calzón quitao

Durante la sesión de la Comisión de Fiscalización, que investiga a Nadine por supuesta usurpación de funciones, Mulder preguntó “a calzón quitao” a Javier Bedoya sobre aquel incidente en que apareció una ropa interior colgada de una ventana de Palacio de Gobierno en marzo de 2014.

Especulación

Entonces, recordó el aprista, se especuló que había sido una reacción de la ex primera dama ante algún suceso político. Sucede que un grupo de pepecistas había acudido entonces a Palacio para hablar sobre el voto de confianza, y tal vez el “Tucancito” sabía algo.

Cauteloso

Con precaución, el pepecista respondió, sobre lo que pudo haber aparecido en esa ventana de Palacio, que “no me consta, no sé qué significado político puede haber tenido, no voy a dar apreciaciones subjetivas”.

Combativa

La noche del último lunes, Chiquitas ampayó a “Mocha” García Naranjo -quien ronda por el Frente Amplio-, nuestra exembajadora en Uruguay, en el clasista La Baguette de Miraflores. Eso sí, no hubo ningún Maserati cerca.

Top secret

¿Será verdad que “Vitocho” García Belaunde se reunió con PPK hace ya tres meses? ¿Habrán hablado algo sobre el siempre picante caso Violeta-Orellana? ¿Fumaron la pipa de la paz?

Adiós al cuentazo

Debido a que algunos congresistas pasaban gato por liebre, la Junta de Portavoces puso fin a las benditas licencias de representación presentadas siempre a último minuto. Con ello podían ausentarse a sesiones clave.

En vereda

Bastaba informar de una supuesta reunión con alguna autoridad para que la licencia pase piola y el legislador se haga humo en las plenarias. Hoy solo procederán las licencias por viaje o por enfermedad.

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