Egipto: Gobierno cierra dos bibliotecas de un defensor de derechos humanos
Egipto: Gobierno cierra dos bibliotecas de un defensor de derechos humanos

Las autoridades egipcias cerraron anoche dos bibliotecas propiedad del destacado defensor de derechos humanos Gamal Eid situadas en zonas marginales de El Cairo, informó hoy a Efe el propio activista.

Eid, que es el director de la ONG Red Árabe para la Información sobre los Derechos Humanos, detalló que la policía egipcia selló las puertas de las dos bibliotecas de Al Karama (dignidad, en árabe) de los populares barrios de Dar al Salam y Tura, sin dar ninguna razón.

Las dos bibliotecas ofrecen libros, clases de arte y proyecciones de películas a al menos 29.000 personas, la mayoría de ellas niños.

Según el abogado, el contenido de las obras y las clases "están totalmente alejadas de la política".

"No sabemos por qué (las cerraron), no hay ninguna denuncia contra nosotros (...) Esto es una continua venganza contra mí", comentó Eid, que se enfrenta a acusaciones de la Fiscalía egipcia junto a otros directores de ONG por recibir financiación extranjera.

Asimismo, el pasado 4 de febrero, las autoridades del país prohibieron a Eid viajar fuera de Egipto, en el marco de una serie de casos para limitar los movimientos de los activistas y opositores.

Eid abrió un total de seis bibliotecas en zonas pobres de la capital egipcia y otras provincias con el dinero de un premio que recibió en 2011 de la fundación alemana Roland Berger por su papel en la defensa de derechos humanos en Egipto contra la dictadura del expresidente Hosni Mubarak.

El pasado martes, el Parlamento egipcio aprobó con una mayoría de dos tercios una polémica ley que restringirá, si es refrendada por el presidente Abdelfatah al Sisi, la existencia y la actividad de las ONG locales e internacionales en el país, según han denunciado las propias organizaciones.

En un informe, Human Rights Watch destacó que cualquier ONG que no se registre bajo la nueva ley en los primeros seis meses desde su aprobación será automáticamente disuelta y que cualquier violación a la ley conllevará una pena de hasta cinco años de prisión y una multa de 1 millón de libras egipcias (65.000 dólares). 

TAGS RELACIONADOS