Turquía: 30 editoriales y 1.656 personas son censuradas por expresar su oposición
Turquía: 30 editoriales y 1.656 personas son censuradas por expresar su oposición

En los últimos doce meses 30 editoriales turcas han sido cerradas por sus vínculos con la cofradía del predicador Fethullah Gülen, a la que el Gobierno acusa de instigar el fallido golpe de Estado del pasado julio, informó hoy la Asociación de Editores  (TYB). Esta asociación publicó hoy un informe en el que denuncia que la libertad de edición ha resultado gravemente dañada en Turquía y que en algunos casos los propios libros publicados han sido utilizados como prueba para arrestar a escritores por apoyo al golpismo.

El estudio señala que 29 de las 30 editoriales cerradas están vinculadas a la cofradía de Gülen, que tenía una red de academias de enseñanza e intereses en el negocio editorial. El Gobierno islamista turco acusa a Gülen de haber infiltrado a sus fieles en las estructuras del Estado para intentar derrocarlo, aunque hasta 2013 fueron sus aliados para debilitar a los sectores laicos que hasta entonces controlaban el aparato estatal.

Las editoriales cerradas se centraban en la publicación de superventas de ficción y manuales de enseñanza. En algunos casos, denuncia el informe, incluso la mera tenencia de material impreso de editoriales relacionadas con Gülen ha sido utilizado como prueba de apoyo a los golpistas.

Ese fue el caso de una pareja de agricultores analfabetos -Halime y Ramazan Akdag- que fueron detenidos durante 15 días por tener en casa libros y revistas vinculados con la cofradía. El gremio de los editores critica además en su informe que en Turquía haya 1.656 personas detenidas, condenadas o a la espera de juicio por expresar su opinión en las redes sociales.

También denuncia que en las cárceles turcas existen limitaciones a los libros que pueden leer los prisioneros y que, por ejemplo, no se permiten publicaciones en kurdo simplemente por la lengua en la que están escritas. El informe concluye recordando que casi 5.000 docentes han sido despedidos de instituciones estatales por supuesto golpismo, que en Turquía hay 162 periodistas detenidos y que el Estado ha confiscado las propiedades de 54 periodistas y escritores sospechosos de haber apoyado la asonada.

La purga llevada a cabo por el Gobierno bajo el amparo de los poderes que le otorga el estado de emergencia ha sido criticada por la Unión Europea y por numerosas ONG, como Amnistía Internacional y Human Rights Watch.

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