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- Decidir que tipo de vacaciones quieres, si es para descansar, hacer turismo de aventura, entre otras opciones. Esto servirá para determinar la duración del viaje y conocer un costo total.

- Elegido el lugar hay que informarse sobre sus atractivos, el promedio de sus precios y los servicios disponibles. Una buena manera es cotizar el viaje en al menos tres agencias para decidir la opción más conveniente.

- El costo de transporte varía si se viaja en automóvil propio, rentado, autobús o avión. La forma más cómoda de viajar es la primera, pero se debe agregar el costo de mantenimiento . La opción más económica es el autobús y hay líneas que ofrecen seguros de viajero y da garantías en caso de atrasos o cancelación de ruta.

- Si ya hay una idea general del costo aproximado se debe hacer un plan para cada día con itinerarios. El gasto diario promedio debe incluir tarifas de entrada, costo de actividades, transporte, alimentos, etcétera.

- Para elegir mejor el hospedaje hay que ver si es solo para dormir y bañarse, pues se puede optar por algo cómodo pero económico. En cambio si se va pasar buen tiempo en el hotel y se necesita de la tecnología y demás comodidades la opción deberá ser más lujosa.

- Otro rubro importante que casi nadie toma en cuenta son los recuerdos o regalos para familiares y amigos, ya que aunque sean pequeños gastos, acumulados pueden sumar grandes cantidades.

- Si se dispone de una finanza saludable se puede aprovechar la tarjeta de crédito para adquirir paquetes de alguna agencia.

- Una vez que hayas contemplado todas las variables conviene recortar gastos. Por otra parte aunque se tenga todo planificado, siempre se debe disponer de un 10 o 20% más del presupuesto para hacer frente a cualquier imprevisto.