La criminalidad es un obstáculo para el crecimiento de Arequipa

Después de Lima y Moquegua, Arequipa es la tercera región con mayor competitividad económica, gracias a los indicadores en salud, educación e infraestructura, pero la alta tasa de criminalidad, el mal funcionamiento de las instituciones públicas y la baja ejecución del presupuesto público hacen que estas ventajas no sean suficientes para atraer inversiones.

Así lo señaló ayer el gerente general del Instituto Peruano de Economía (IPE), Diego Macera, durante su visita a la ciudad.

El especialista, refirió que de acuerdo al Índice de Competitividad Regional 2017, Arequipa está entre los 8 peores departamentos (ejecución del gasto público y seguridad), donde también figuran, Puno, Pasco, Loreto y Cajamarca.

Sin embargo, en los últimos 10 años la región cuadruplicó su presupuesto público y pasó de mil millones de soles a 4 mil millones de soles. Esta cantidad debería reflejarse con la mejora de los servicios, pero según Macera, no se percibe porque los gobiernos locales prefieren invertir en proyectos pequeños.

Para el año 2017 los municipios tienen mil 246 proyectos, pero cada uno con un presupuesto promedio de 727 mil soles, que en su mayoría están destinados a transporte y saneamiento, mientras que el Gobierno Regional cuenta con 217 iniciativas valorizados en 3. 6 millones de soles.

MINERÍA. El crecimiento económico de la región en el 2016 se debió al desarrollo de la minera Cerro Verde. Si el proyecto Tía María se llegara a ejecutar, el impacto sería mayor.

Macera considera que son tres los principales obstáculos que impiden agilizar los proyectos mineros y estos son: la baja del precio del cobre, la burocracia y los conflictos sociales. En el penúltimo punto, la licencia de un proyecto tendría que reducirse de 5 a 3 años y sin la necesidad de obviar las normas.

Reelección. En opinión personal de Macera, la ley que impide la reelección no es favorable para el desarrollo de las regiones

DATOS. El Perú es uno de los países que más puede crecer en los siguientes 35 años.

Los arequipeños son 44% más ricos que el promedio peruano.