​Alto índice de atenciones no son emergencias y causan hacinamiento en hospitales 

En el Perú, la Defensoría del Pueblo recientemente supervisó 90 servicios de emergencia de los hospitales. De la región Junín tuvieron en cuenta 6 nosocomios: Hospital Regional Docente Clínico Quirúrgico Daniel Alcides Carrión y Hospital Nacional Ramiro Prialé Prialé (Huancayo), Hospital Regional Docente de Medicina Tropical Julio Demarini Caro y Hospital de la Selva Central y Enfermedades Tropicales La Merced “Hugo Pecse” (Chanchamayo), establecimiento De Apoyo Manuel Higa Arakaki y San Martín de Pangoa (Satipo).

RESULTADOS. Este trabajo ha permitido contar con información que delata serias deficiencias en el derecho al acceso a la salud. A pesar del carácter prioritario de la atención de emergencias, los comisionados de la institución comprobaron que los nosocomios no disponen de servicios complementarios. El estudio reveló que el 51,1% de hospitales supervisados carecen del área de ecografías, es decir, no cuentan con un ecógrafo, aunque es una de las pruebas más importantes para el diagnóstico de los pacientes.

Entre la información preocupante que será entregada a las autoridades del Ministerio de Salud (Minsa), la entidad comprobó que el 85% de atenciones no son emergencias (prioridad I y II), situación que origina el congestionamiento y hacinamiento en dichos servicios.

A ello se suma el alto déficit de equipos y mantenimiento de los mismos, así como de insumos y servicios complementarios para una atención oportuna, en especial en los nosocomios administrados por los gobiernos regionales.

La situación de hacinamiento que sufren los pacientes se ve reflejada en los siguientes datos: en el 66,7 % de los servicios de emergencia se ha “institucionalizado” el uso de camillas en los pasillos; en el 62,2%, varones y mujeres comparten el mismo espacio de atención; el 79,8% de usuarios permanece más de 12 horas en espera, lo que aumenta el riesgo de contraer infecciones intrahospitalarias, etc.

REFLEJO. También supervisaron 393 farmacias en todo el país, encontrando que en algunas regiones el precio es más alto que en Lima.