En los exteriores del cementerio de La Merced en Chanchamayo se han instalado vendedores de flores de Tarma y de la zona, vivanderas y comerciantes de licor.
Cientos de personas visitan el cementerio de la ciudad visitando a sus seres queridos, llevan comida y bebidas. Otros incluso llevan músicos.
Policías municipales y serenos resguardan la seguridad en la puerta del cementerio, evitando que ingresen licor, pero los vendedores se las ingenian y con escaleras puestas por la Avenida Manuel A. Pinto en una puerta de metal ingresan las bebidas por las rejas.
En el interior venden comida al paso para los visitantes. A medida que baja la intensidad del calor llegan mas personas que se quedarán hasta altas horas de la noche.