Extorsionan a empresarios con granadas  y explosivos
Extorsionan a empresarios con granadas y explosivos

Vuelven los temidos extorsionadores. Desconocidos atemorizan a empresarios y lanzan petardo en su casa y una granada en su negocio.

La noche del último sábado, la propietaria de la pollería Ramírez, en el distrito de La Tinguiña, Cecilia Quispe Huayapa recibió una extraña llamada que al parecer provenía del penal de Ica. Según contó Cecilia, le dijeron que eran de Cachiche y le exigían el pago de 50 mil soles a cambio de su tranquilidad.

La empresaria le restó importancia y siguió trabajando, pero otra vez recibió una llamada del mismo número y entonces respondió su esposo. Al inició creyeron que se trataba de alguna broma.

Pero las llamadas se volvieron continuas y prefirieron no responder. Los delincuentes entonces empezaron con los mensajes de texto del mismo número.

La exigencia era desesperada y les daban solo 30 minutos para el depósito, de lo contrario atentarían contra su negocio y su casa de forma simultánea. Esa era la advertencia contra los empresarios.

Los mensajes eran claros y precisaban los lugares donde iban a dejar los explosivos.

Uno de los mensajes les señalaba: “revisa el balcón de tu casa y el baño de tu pollería. Quieres que volemos tu negocio, te va salir más caro”.

En otro mensaje les decían que de ellos dependía su tranquilidad o serían perjudicados con explosiones en ambos lugares.

La advertencia hizo preocupar a los esposos –dueños del negocio– y rápidamente acudieron a los ambientes señalados por los extorsionadores. En el balcón de su casa del distrito de Parcona, en el pasaje Santa Rosa, encontraron una mecha de dinamita y en el local de su negocio, en la avenida El Parque del mismo distrito, hallaron una granada tipo piña, que estaba en uno de los baños.

La dueña de inmediato dio aviso a la policía y los agentes de la UDEX controlaron la situación ante la amenaza de una posible detonación del explosivo dejado por los delincuentes.

La unidad especializada de la Depincri tomó el caso de extorsión y ya investiga para ubicar a los desconocidos que no serían del penal de Cachiche.

En los diferentes ambientes de ambos lugares se realizó las inspecciones para descartar que haya otro elemento explosivo. Finalmente, la policía se comprometió a investigar al extorsión.

Según contaron las trabajadoras del local, estaban a punto de cerrar la pollería cuando insistentemente un grupo de chicos pedía ser atendido, por lo que abrieron las puertas y les sirvieron.

La granada fue dejada en la papelera del baño de los hombres, por lo que se presume que los últimos en ingresar serían los cómplices.

La policía confirmó que ambos explosivos contenían material químico para detonar y una mala manipulación pudo haber ocasionado una tragedia. El artefacto explosivo sería un artefacto improvisado, compuesto por dinamita, detonador y mecha de seguridad, que fue llenado en el interior de una granada tipo piña de juguete, de color verde, dando la apariencia de una granada de guerra, según contaron los custodios.

La propietaria pide a las autoridades policiales realizar la investigación. También invocó que las autoridades locales tomen cartas en el asunto en el tema de la seguridad ciudadana.

“No es justo que nosotros trabajemos tanto para que otro quiera llevarse la plata fácil”, refirió indignada Cecilia Quispe.

Ayer por la mañana también llegó a la Depincri otro caso de posible extorsión en del distrito de Guadalupe. Se trataría de un humilde negociante que tiene una bodega en su casa y también es extorsionado. Ante su negativa, los delincuentes hace dos días le dejaron un explosivo en su puerta.

El agraviado lamentó dicha situación y guardó el detonante para luego de algunos días recién acudir a la Depincri y hacer la denuncia.

La policía de la Unidad Especializada cuestionó la dejadez del denunciante, que no acudió de inmediato a la policía.