Sombras en la gestión de Elidio
Sombras en la gestión de Elidio

Mientras Alejandro Toledo y el bochornoso tinglado de las coimas del caso Lava Jato nos tiene a todos concentrados, otras tropelías se van abriendo paso en Trujillo y van saliendo a la luz pública. En la municipalidad de Trujillo, dos casos recientes en la gestión del alcalde  han revelado una prematura sombra de corrupción que no puede pasar desapercibida.

Los dos casos tienen que ver con las compras. En uno, las computadoras y los útiles de escritorios presuntamente sobrevalorados y ya en manos de la Fiscalía. Decenas de miles de soles en precios inflados en relación al mercado. Varias firmas de funcionarios municipales en cuestión por esta compra de más de 800 mil soles.

El otro caso es el de la compra de compactadoras, esos vehículos que deberían servir para la limpieza de la ciudad a través del Segat. La adquisición, por cerca de 2 millones 200 mil soles, ha sido observada por la Contraloría General de la República, que a través de un informe halló evidencias de direccionamiento. Es decir, al parecer hubo intención aquí de favorecer a una empresa en particular, pues las bases y las características consignadas así lo demuestran, de acuerdo a la mencionada auditoría.

Hace pocos días, incluso, el extitular del comité de licitación y exfuncionario de confianza del alcalde, Salomón Chanduví, dijo a este diario: “No voy a ir preso por unos cuantos ladrones y avivatos”. ¿A quién se refería Chanduví? No lo dijo directamente, pero sí lo insinuó cuando se defendió de cualquier cuestionamiento al señalar que Ismael Iglesias, otrora gerente general de la comuna y brazo derecho del alcalde, sí tenía responsabilidad en estos entuertos. Iglesias había dicho antes que la responsabilidad era del comité de licitación como ente autónomo y que él solo firmaba tras su conformidad.

Estamos hablando de más 3 millones de soles que salieron de nuestros bolsillos para adquirir bienes en beneficio de todos nosotros, pero que pudieron ser mal manejados para favorecer a algunos pocos. La historia de toda la vida, la de siempre. Estemos atentos.

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