Lambayeque: Buscan a testaferros de los hermanos Carlos y Samuel Roncal Miñano
Lambayeque: Buscan a testaferros de los hermanos Carlos y Samuel Roncal Miñano

Tras la desarticulación de las presuntas bandas criminales “La hermandad del norte” y “Los empresarios del norte”, la Fiscalía y la Policía buscan identificar a los testaferros que tendrían los hermanos Carlos y Samuel Roncal Miñano, en la región 

Fuentes de la Policía revelaron que, según las investigaciones, son varias las personas que habrían sido utilizadas por los hermanos Roncal Miñano para ocultar dinero ilícito.

PROPIEDADES. Estas personas cumplirían el rol de testaferros y tendrían una buena cantidad de dinero invertida en empresas, viviendas, departamentos y modernos vehículos.

De esta manera, para los investigadores, los implicados en “Los empresarios del norte” buscaban que estos bienes muebles e inmuebles no signifiquen un aumento en su patrimonio, sino en el de otras personas, buscando así evadir a la justicia.

“Seguimos tratando de identificar a los testaferros, sabemos que en algunas azucareras hay unos cuantos que tienen propiedades y vehículos con dinero de los Roncal. La Fiscalía también está evaluando solicitar una orden de detención preliminar”, expresó la fuente de la Policía.

Por otro lado, aseguró que el grupo especial de agentes policiales continúa buscando al mayor de los hermanos, Carlos Roncal conocido con el alias de “Carlitos”.

“Los colegas están viajando hasta otras localidades y ciudades donde presuntamente puede estar escondido el empresario que presenta orden de captura, pero hasta el momento con resultados negativos”, añadió.

También dijo que se busca arduamente a los cabecillas de ambas redes delictivas, como son: Jhon Díaz Ponce (a) “Jhon Caco”, José Alberto Zambrano Huamán (a) “Negro Zambrano” y los hermanos Sánchez Coronel., entre otro prófugos.

SE DEFIENDE. Por su parte, el empresario detenido Samuel Roncal Miñano, a través de una misiva que escribió, alega ser inocente de todos los delitos que se le imputan.

A través de una carta escrita por su mismo puño y letra, desde el interior de la carceleta de la División de Investigación Criminal (Divincri), Samuel Roncal rechaza cualquier vinculación con la organización criminal “Los empresarios del norte”.

“Soy empresario azucarero hace 19 años y cumplo con mis obligaciones y deberes y como todo inversionista pago mis tributos de acuerdo a ley. Como padre de familia, esposo, hijo y ciudadano rechazo totalmente todas las vinculaciones delictuosas que sin fundamento legal me incluyan en una organización criminal deteniéndome de manera arbitraria e inconstitucional”, señala en el escrito.

Además, indica que se allana a todas las investigaciones que la justicia del país inicie hacia su persona y para ello podrán levantar el secreto de sus comunicaciones, bancaria y tributaria. “Todo lo que he forjado empresarialmente es el resultado de mi trabajo lícito de años, por lo tanto niego rotundamente estar vinculado al asesinato del funcionario de la Sunat, Luis Roberto Cieza Herrera. Debo precisar que jamás tuve una investigación de orden tributario hecha por este funcionario”, aseguró y además exhortó a realizar un trabajo de inteligencia con responsabilidad.

CRIMEN. Por otro lado, quien también está inmerso en la investigación de ambas bandas delictivas, pero aún no cuenta con orden de captura es Antonio Napuri Herbozo (55) (a) “Viejo Antonio”.

Según consta en la carpeta fiscal 20-2016, Antonio Napuri sería uno de los personajes que ordenó la ejecución de asesinato del dirigente de construcción civil, Manuel Jesús Gallardo Molina (41), conocido como “Gallardo”, hecho ocurrido el 9 de junio del 2015, en el pueblo joven Simón Bolívar.

El crimen se habría perpetrado porque la víctima se apoderó del dinero recaudado de una pollada, que era para la instalación de fluido eléctrico de la invasión Consuelo Díaz de Casiano en el distrito de Picsi. También del dinero de la venta de lotes de la misma invasión.

Además por haber ingresado como fiscalizador de una obra de construcción civil que estaba a cargo de Franklin Vilchez Balcázar (a) “la Lola” y del mismo “Viejo Antonio”. Gallardo Molina tomó el nombre del apresado “Pepe Clavijo”.

Es por ello que “Viejo Antonio” junto a Epifanio Sánchez Calderón y Vilchez Balcázar ordenaron su muerte, según las investigaciones de la Policía y del Ministerio Público.

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