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Un anunciado fenómeno de El Niño de grandes magnitudes no solo afectaría a las principales ciudades de Lambayeque, causando inundaciones y el colapso de las redes de alcantarillado, sino que, incluso, podría dejar a la región incomunicada.

Y es que según las autoridades relacionadas con el tema, se trata de una posibilidad que no descartan, teniendo en cuenta la experiencia de eventos anteriores y el hecho de que por lo menos 10 de las 20 carreteras departamentales han sido declaradas en alto riesgo. Asimismo, el estado de los puentes no sería menos preocupante, sobre todo, si hablamos de aquellos que son vitales para la comunicación con otras regiones, como es el caso de los ubicados en Reque y Ciudad Eten.

PELIGRO. Quien fue enfático al señalar que existe una preocupación por tomar acciones frente a las consecuencias de un eventual fenómeno de El Niño, fue Carlos Balarezo Mesones, jefe del Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) de Lambayeque. Él, además, indicó que no es posible descartar que puedan darse situaciones como las vividas en los eventos que se registraron en los años 1983 y 1998.

“Definitivamente existe el peligro de que podamos quedar incomunicados, (...) esa situación se está analizando y se van a hacer todos los esfuerzos para evitar que suceda”, refirió Balarezo Mesones, quien además dijo que se viene evaluando la verdadera situación de los puentes en la región: entre 25 y 30 estructuras cuya resistencia sería crucial para definir las medidas que se tomarán en adelante, teniendo en cuenta que algunos podrían ser utilizados como vías alternativas, en caso los más antiguos llegasen a sufrir daños.

“Se tiene que ver qué trabajos de reforzamiento se van a hacer en zonas como Ciudad Eten, Reque, tenemos también el puente Pucalá, que es nuevo; el puente Hércules que tiene más de 85 años, al lado del cual hay un puente Bailey (prefabricado) que fue colocado en el 2012, pero ambos tienen que ser evaluados”, mencionó el jefe del COER-Lambayeque.

Recalcó que la principal preocupación se encuentra en los puentes ubicados en la carretera Panamericana Norte: Úcupe, Reque, Motupe I y Motupe II (a la altura del peaje del distrito de Mórrope); mientras que en la carretera hacia el distrito de Olmos (Fernando Belaúnde Terry), se pueden contar los puentes La Leche y Motupe.

Respecto a lo que se viene haciendo para tratar de aminorar los riesgos, afirmó: “En algunos casos se ha hecho reforzamiento (en los puentes), pero se tiene que complementar, no solamente en la estructura del puente, sino obras de enrocado y defensas ribereñas, aguas arriba y aguas abajo del puente, esperamos terminar de hacer eso antes de los meses de noviembre y diciembre”.

Agregó que, en muchos de los casos, se tienen que tomar acciones por parte del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, en coordinación con empresas concesionarias como Covisol, que tiene a su cargo la obra de la Autopista del Sol, en la carretera Panamerica Norte.

PRINCIPALES VÍAS. A su vez, el gerente regional de Transportes y Comunicaciones, Juan Pablo Horna Santa Cruz, señaló que de presentarse un fenómeno de El Niño de grandes magnitudes, todas las carreteras departamentales se verían afectadas, aunque en distinta medida.

“De las 20 carreteras departamentales, 10 hemos declarado con vulnerabilidad y 10 que de repente no tendrían un riesgo mayor”, refirió el funcionario.

Explicó que entre las vías que se verían afectadas se encuentran las que conectan con zonas como Colaya, La Ramada, Penachí, Cañaris e Incahuasi, así como carreteras internas pertenecientes a diversos distritos, entre ellos, Mórrope.

En cuanto al estado de los puentes, fue claro el indicar que los de tipo artesanal, como Sorronto y La Otra Banda, no soportarían el efecto de las fuertes lluvias.

Por tal motivo, señaló que durante las últimas semanas han sido inspeccionados un total de 7 puentes por parte de Provias Nacional, entidad a la que se busca comprometer con el envío de puentes Bailey para afrontar las situaciones que se pueden presentar durante el fenómeno de El Niño. “De Provias ya tenemos seguro que vienen dos (puentes), aunque les hemos dicho que mínimo son 5 puentes los que pueden ser afectados”, aseveró.

En cuanto al peligro de que la región quede incomunicada, el funcionario expresó: “Lo que sí es cierto es que hay que ponernos en el peor de los casos, por supuesto que si hay un niño de la contundencia de años anteriores, que no es cosa de juego y no sabes lo que puede realmente suceder, (...) es previsible y en base a esa previsión se han establecido lugares donde se tendrá ayuda humanitaria en previsión de que queden aislados, y en caso así suceda, intervendrá la Fuerza Aérea”.

MEDIDAS. Como se ha mencionado más de una vez, el tiempo para tomar medidas o ejecutar obras de prevención ante el temido fenómeno es, a estas alturas, sumamente corto. Sobre lo que se haría en caso la región quede, efectivamente, aislada a causa de las fuertes lluvias, Carlos Balarezo indicó que se tienen alternativas.

“En algunos casos, se pueden colocar puentes modulares o badenes, cuando el caudal del río lo permita, así como en otras situaciones se tendrá que habilitar un puente aéreo, aunque está la posibilidad vigente de que se utilice el Grupo Aéreo N° 6 para este fin”, explicó.

No obstante, mencionó que lo más probable es que, al igual que en años anteriores, se tendrá que utilizar como ruta alternativa el puente Hércules, así como el puente Bailey ubicado junto a él.

Otras medidas consisten en tener almacenes distribuidos en distintos lugares estratégicos para atender con ayuda humanitaria, en caso se interrumpan las carreteras, además de contar con centros de salud abastecidos y maquinaria distribuida en diversos puntos críticos.

“Están zonas como Ciudad Eten, Olmos, Motupe, la zona de Mórrope donde también podrían haber problemas, el mismo puente Reque, y en general las zonas en las que se ubican los puentes. Ojo que también se deben tener en cuenta las zonas altoandinas, donde también habrían interrupciones a causa de deslizamientos”, comentó.

Juan Pablo Horna Santa Cruz, a su vez, indicó que por el momento se vienen realizando tareas de descolmatación.

“Desde Mocupe hasta la salida a Piura, hemos considerado 117 alcantarillas para que sean intervenidas y descolmatadas, al igual que 10 puentes y 12 pontones (puentes con una longitud menor de 10 metros). Tenemos que luchar para que la región no quede incomunicada”, refirió el funcionario regional.

En todo caso, a pocos meses de culminar el año, se espera que estas medidas contribuyan a debilitar el golpe que pueda darnos El Niño.

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