Piura: Aleida Dávila y Orlando Pastrana murieron congelados en Cerro Negro
Piura: Aleida Dávila y Orlando Pastrana murieron congelados en Cerro Negro

En un paraje inhóspito de la montaña, todavía acurrucada dentro de la carpa donde Manuel Herrera Peña la dejó esperando ayuda, los de alta montaña de la l y la  hallaron ayer el cuerpo de Aleida Verónica Dávila Montes.

La comunicadora social de 34 años de la empresa minera Río Blanco fue encontrada a 500 metros de distancia de donde yacía, también sin vida, su compañero de trabajo Zózimo Orlando Pastrana Quezada, de 36 años.

La zona donde se ubicaron los cuerpos está ubicada a unos 3 mil 800 metros de altitud, en la cima del denominado Cerro Negro, en territorios de la comunidad campesina de Yanta, provincia de Ayabaca, región.

La ubicación de los cuerpos del topógrafo natural de Nazca y de la periodista cajamarquina, coincide con la información que proporcionó a la policía Manuel Humberto Herrera Peña (25), el único sobreviviente de la más terrible tragedia suscitada en los andes piuranos en lo que va del año.

Así los encontraron. De hecho, fueron las coordenadas del equipo GPS que portaba Herrera cuando lo encontraron el 20 de julio, las que permitieron a los equipos de rescate rastrear a los desaparecidos y llegar hasta su ubicación exacta ya pasado el mediodía del jueves, informó la minera.

El primer cuerpo en ser encontrado fue el de Aleida Dávila, cuando los relojes marcaban las 12:20 del día. Media hora después se ubicó el de Orlando Pastrana, a 500 metros de distancia uno del otro, según reportó el equipo que los buscaba por tierra.

El hallazgo del tercer desaparecido, Segundo Manuel Tacure Saavedra, cocinero de 28 años y contratado por la minera como asistente de la fallida expedición topográfica, sería cuestión de horas pues el grupo de búsqueda todavía no arribaba al punto donde el propio Herrera Peña asegura que lo dejó ya sin vida. Hasta ayer, los rescatistas todavía iban a su encuentro.

Por la información proporcionada a las autoridades por el sobreviviente, Tacure Saavedra habría fallecido el 14 de julio y un día después habría ocurrido lo mismo con Pastrana Quezada. El 16 de julio, según dicho testimonio, se decidió a descender solo la montaña dejando a su compañera Aleida Dávila con las únicas provisiones que les quedaba: un poco de suero, agua y hierbas.

Esta información, sin embargo, deberá ser cruzada con las evidencias que la policía encontró en la misma zona del rescate.

El frío los mató. Por lo pronto, las autoridades precisaron ayer que los dos cuerpos hallados hasta el momento “tienen varios días de fallecidos”, lo que apuntala la versión dada por el hombre que salió vivo de la montaña para contar lo sucedido.

En fuentes de la operación de rescate, se conoció que los dos trabajadores de Río Blanco ya ubicados habrían perecido por hipotermia, a causa del inclemente frío que reina en esta zona de páramos de la puna piurana.

Hoy los traen. Una vez confirmado el hallazgo, el fiscal provincial de Ayabaca, Néstor Luis Sosa Carrillo, dispuso el levantamiento de los cuerpos en una segunda operación encomendada a la policía y que demandará varias horas dado lo agreste de la zona.

En Piura, las autoridades comunicaron que todos los esfuerzos están encaminados a ubicar y recuperar los restos de Segundo Tacure, los que siguen prisioneros de la inclemencia del mal tiempo en lo alto del Cerro Negro.

Inmediatamente después de eso, se alistará un equipo de rescate para bajarlos de la montaña y transportarlos hasta el punto de extracción por vía aérea, un helipuerto levantado a golpe de machete a unos seis minutos de vuelo desde donde se ubicaron ayer los dos cuerpos.

En los cálculos más optimistas del equipo de rescate, se prevé que recién hoy los cuerpos de las víctimas serán trasladados a Piura en helicópteros del Ejército y la Fuerza Aérea.

voz de la minera. La empresa Río Blanco señaló que se trata de un momento de hondo dolor para los familiares de las víctimas y anunció que no los abandonará.

Carla Díaz mencionó que la empresa hizo todo lo posible por encontrar a sus trabajadores y agradeció el apoyo brindado por la policía, las fuerzas armadas y los comuneros y ronderos de Ayabaca. Anunció que se pondrán a trabajar junto a la policía para cerrar esta historia.