Procuraduría entra a tallar en Caso Edita

Pese a encontrarse en su fase final, las últimas diligencias en la investigación por la muerte de Edita Guerrero programadas para ayer se frustraron, debido a la inasistencia de tres de los cuatro testigos citados por la Fiscalía.

El único. Sólo el médico del Hospital Regional Cayetano Heredia, Dante Salazar La Torre, acudió por la mañana a prestar testimonio en el despacho de la Segunda Fiscalía Provincial Penal de Piura.

Sin embargo, su presentación no aportó mucho al caso pues el facultativo refirió no haber atendido a la cantante de Corazón Serrano, cuando ésta llegó al área de Emergencias del nosocomio de Essalud el 21 de febrero de este año.

Uno de los testigos programados por la fiscal Victoria Allemant Luna para que rinda su testimonio es el hermano de Edita, Calixto Fredesmiro Guerrero Neira. Pero éste dejó esperando a la magistrada.

Procuraduría. Lo nuevo del Caso Edita, el que esta semana ingresó a su sétimo mes de diligencias, ha sido un pedido del Procurador Público a cargo de los Asuntos Judiciales del Ministerio de Justicia para constituirse en actor civil.

La solicitud está referida a la investigación que el Ministerio Público lleva adelante contra seis médicos de la Clínica Sanna Belén, imputados como cómplices de los delitos Contra la Vida, el Cuerpo y la Salud (parricidio, feminicidio), y Contra la Administración de Justicia en agravio de Edda Guerrero y el Estado.

En la medida que el Estado también es parte agraviada en esa investigación, la Procuraduría Pública pidió constituirse como parte civil a efectos de cautelar la reparación civil en caso de producirse una sentencia condenatoria.

Como se sabe, la Segunda Fiscalía de Piura imputa complicidad en la presunta muerte violenta de Edita a los médicos Aldo Dalton Vences Balta, Pablo Alberto Sánchez Barrera, John Gabriel Mogollón Aparicio, Rafael Eduardo Gallo Seminario y Álex Paico Sernaqué.

Ellos estuvieron al cuidado de la artista de cumbia cuando ésta fue internada el 22 de febrero en la clínica piurana, le diagnosticaron la presencia de un aneurisma y cuando falleció certificaron su muerte por esa causa natural.

La investigación en su contra y contra el viudo de la cantante, Paul Olórtiga, se basa en los resultados de la necropsia de Edita, la que concluyó que la agraviada pereció a consecuencia de una luxación de la vértebra Atlas. Esa lesión y otras 36 que presentaba el cuerpo de la cantante se atribuyen a su viudo.