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Eran aproximadamente las 7:30 horas de ayer cuando Zulena Lucrecia Luque Salinas, secretaria de la Gerencia de Desarrollo Social del Gobierno Regional de Puno, acudió a su trabajo en el jirón Moquegua y se dispuso a realizar sus labores.

Sin embargo, sobre su escritorio encontró un misterioso sobre que llevaba su nombre, ella sin imaginar el contenido lo abrió y se dio con la sorpresa de que dentro había una granada de guerra, tres balas y un aterrador mensaje.

Peligro. Luego de encontrar el explosivo la mujer entró en pánico y de inmediato se contactó con personal de seguridad de GRP, el cual a su vez llamó a la Policía.

Al lugar de inmediato llegaron agentes de la Unidad de Desactivación de Explosivos (UDEX), junto a agentes del Departamento de Investigación Criminal, quienes por seguridad evacuaron a todos los trabajadores de esta institución.

Minutos de tensión se vivieron en el interior hasta que la Policía recogió el explosivo que posteriormente fue internado en los almacenes de la UDEX, donde permanecerá a buen recaudo.

Durante las diligencias, la policía descubrió que las cámaras de vigilancia de esta institución fueron apagadas desde las 18:40 horas del miércoles hasta las 9:00 horas del jueves.

Mensaje. La nota que fue encontrada en el sobre contenía mensajes amenazantes e insultos contra la trabajadora, a quien acusan de actos de corrupción que además involucrarían a otros funcionarios de esta institución a quienes identificaron como Oldazabal, James, Diego y Noriega.

“Lárgense o mueren y se van con sus familias o vayan comprando sus sillas de ruedas con todo lo que han robado estos obsequios son solo para advertirles que no jugamos”, se lee textualmente la misiva e incluso les dan a los mencionados un plazo de 72 horas para marcharse de la institución estatal.

Disputas. Algunos trabajadores del GRP, que prefirieron no identificarse, comentaron que en esta institución existen disputas por los puestos laborales y que la secretaria Luque Salinas sería una persona influyente en los cambios que se aprueban en el despacho gerencial.

Por su parte, la trabajadora amenazada prefirió no declara a la prensa, sin embargo en diálogo con la Policía señaló que sabe quienes serían los autores de la amenaza.