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Nuevamente el grifo de la Municipalidad de Pocollay hace noticia. Tras un operativo relámpago realizado ayer por el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin), fue clausurado temporalmente por presentar altas condiciones inseguras en la prestación del servicio.

Eufrasio García Romero, contador del grifo municipal, indicó que no son muy graves las faltas detectadas por Osinergmin.

“Han encontrado en malas condiciones los accesorios de los surtidores, cambiar las tuberías que están ya en desuso por unas más modernas, construir un pozo a tierra y colocar un extintor UL”, manifestó.

Por estas deficiencias se ordenó el cierre del establecimiento por el lapso de tres días.

Cerco. Los trabajadores de la entidad supervisora empapelaron dos de los cuatro surtidores que aún funcionan del grifo de Pocollay, además cercaron el grifo con cinta de seguridad para impedir que el acceso de vehículos.

Otra medida adoptada fue colocar precintos de seguridad a los despachadores de combustible.

Según Eufrasio García, pedirán una ampliación de tiempo para adecuarse a las exigencias del organismo supervisor.

“La construcción del pozo a tierra será lo que mas nos demore, el resto es reemplazar”, relató.

Según el contador, por día el grifo municipal genera en ventas un promedio de 7 mil soles. Mientras que el abastecimiento de camiones recolectores de basura, unidades de serenazgo, vehículos municipales, motos, entre otros vehículos que normalmente recibían combustible del grifo, lo tendrán que hacer en otro establecimiento mediante vales, dijo García.

El personal que distribuye combustible en el grifo tendrá que asistir con normalidad a su centro de labores hasta que se reinicie la operatividad de los surtidores.