El desagüe y la basura invaden las calles de Tumbes
El desagüe y la basura invaden las calles de Tumbes

Hoy en día, la ciudad de sufre una grave contaminación no solo por la acumulación de residuos sólidos en las calles sino también por el colapso de aguas servidas que llegan a inundar distintos sectores.

Esta situación se agudiza cada día más sobre todo en época de verano donde el sol ocasiona la descomposición de la basura y genera olores nauseabundos y la proliferación de enfermedades.

El mercado de Tumbes, el centro poblado de Pampa Grande y el barrio San José son los más afectados con estos dos graves problemas que conllevan a que los ciudadanos contraigan cualquier tipo de enfermedad.

En un recorrido que Correo hizo por los puntos críticos de la ciudad observó que en los exteriores del centro de abastos se encuentra infestado de aguas residuales así como residuos tóxicos.

Los fuertes olores que emanan estos inservibles descompuestos originan que más de un poblador que acude a realizar sus compras diarias se retire con un malestar.

En el mercado existe un punto de acopio, sin embargo, dichos residuos sólidos son arrojados indiscriminadamente por los comerciantes como por los transeúntes.

En el barrio San José, también se registra el colapso de aguas residuales que discurren por la vía canal junto con la basura, esto ocasiona que los vecinos no puedan ni almorzar por los fuertes olores que se propagan hasta sus casas.

“Este problema es de todos los días, nuestros hijos juegan cerca a las bolsas de basura que se arrojan y el carro recolector no se digna a aparecer en el transcurso del día”, señaló una moradora del barrio San José.

El subgerente de Limpieza Pública, Parques y Jardines de la municipalidad de Tumbes, Carlos Neyra Alemán, sostuvo que se realizan tres recorridos durante el día y es la población quien no respeta los horarios para sacar su basura a las calles.

“Los domingos es poco el personal que sale a las calles pero no dejamos de atender a todos los sectores”, manifestó el funcionario edil.

Sin embargo, los ciudadanos aseguran todo lo contrario porque es de todos los días visualizar residuos domésticos en las esquinas de las calles, así como en el mercado.

A esto se le suma el colapso frecuente de aguas servidas que contaminan los productos de pan llevar que se comercializan en los exteriores del centro de abasto.

Según el servidor público aún existen 45 puntos críticos donde los moradores arrojan los desperdicios y que es combatido por 90 personas que salen a las calles los domingos a cumplir con su trabajo.

En similar situación se halla el centro poblado de Pampa Grande.

SALUD. Esta caótica situación ha provocado que el jefe de la Dirección Ejecutiva de Salud Ambiental (Desa), Miguel Fernández Flores, recomiende a la población no exponer los desechos al sol.

“En cierta parte la población es responsable de no sacar la basura en horarios que no pasa el carro recolector porque pueden ser esparcidas por los perros y el sol provoca su descomposición”, dijo el director de la Desa.

No obstante, advirtió que la exposición de la basura al sol puede ocasionar graves daños a la salud de la ciudadanía debido a que esto genera la plaga de insectos y roedores que llegan a las viviendas.

“Las cucarachas, moscas y ratas pueden ocasionar enfermedades diarreicas en la población sobre todo en los niños”, señaló el funcionario.

Informó que pasadas las 48 horas inicia la descomposición de la basura sobre todo si se expande largo tiempo al sol.

“Los vecinos que se encuentran cerca a la inmundicia están expuesto a enfermedades dérmicas (piel), pues pueden sufrir de alguna alergia”, exhortó Fernández.

Las aguas residuales también afectan a la salud de la población aledaña tras ocasionar la propagación de mosquitos y zancudos cuyas enfermedades pueden ocasionar hasta fiebre.

“El problema del recojo de inservibles como el colapso de desagües son dos males que debe solucionar la comuna provincial de Tumbes”, declaró Miguel Fernández.

Asimismo recomendó a la población hacer exigir a las autoridades responsables del cuidado de la ciudad. Además de exhortarlos a respetar los horarios que pasa el carro recolector porque así se evitarían enfermedades.

Resaltó que ahora el responsable de realizar la supervisión diaria para que la comuna cumpla en no exponer a la ciudad de una contaminación es el Ministerio del Ambiente.

“Es el turno de este Ministerio desarrollar las sanciones, si es que lo cree conveniente. La Desa por su parte puede realizar supervisiones y recomendaciones”, sostuvo Fernández Flores.

PROYECTOS. Como se sabe para disminuir estos males existen dos proyectos, bajo la responsabilidad de la Municipalidad Provincial de Tumbes, los que hasta la fecha se encuentran estancados.

Uno de ellos es “Jica” en el que llegarían vehículos para el recojo de desechos así como para trabajar en el relleno sanitario. De este proyecto llegó una parte de la maquinaria y falta el restante.

Para mejorar el sistema de alcantarillado y evitar el colapso de desagüe se proyectó la ejecución de 4 obras de saneamiento en los puntos críticos, pero aún no se terminan de levantar las observaciones hechas por la empresa concesionaria Aguas de Tumbes S.A (Atusa).

Esto ha conllevado a que tanto la autoridad edil como sus funcionarios teman a que el presupuesto destinado para estas obras se reviertan al Estado. Mientras la espera continúa la población sigue conviviendo con los desperdicios y aguas servidas por doquier.

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