Tumbes: “Los Chivitos” pagaban S/ 700  por mes a cada policía implicado
Tumbes: “Los Chivitos” pagaban S/ 700 por mes a cada policía implicado

Durante el segundo día de la megaudiencia de prisión preventiva contra las 22 personas imputas de pertenecer a la organización criminal “Los Chivitos de Campo Amor”, el fiscal contra la Criminalidad Organizada de Tumbes, Rogelio Pita Jiménez, reveló que los policías investigados en la red delincuencial cobraban mensualmente S/. 700.00 cada uno, al cabecilla de la banda Jhon Rivera Pisfil alias “Jhon Chivo”.

Este cobro, alegó el fiscal, se daba a fin de que los agentes mantengan alertado al cabecilla de la red, de cualquier operación policial en la provincia de Zarumilla.

El representante del Ministerio Público basa esta información en una declaración de un colaborador eficaz con código de reserva.

VÍNCULO. Según el folio fiscal, el cabecilla de la banda alias “Jhon Chivo”, en una declaración que concedió a la Fiscalía luego de haber sido capturado, detalló el inicio de la vinculación de su red con los cinco agentes policiales intervenidos y con el excomisario de Zarumilla, el comandante Marco Antonio Rojas Vargas, quien según Pita, también se encuentra en calidad de investigado.

En audiencia judicial Rogelio Pita Jiménez cita la declaración de Jhon Rivera Pisfil, el cual en la pregunta N° 8 reconoce que los policías, Lenin Ventura Calmet, Luis Ayasta Romero, Luis Santacruz Saavedra y Roberto Ojeda Salas, en una oportunidad en el mes de marzo del año pasado en la vía panamericana norte, a la altura del hotel Boulevar, lo interceptan y junto a otros efectivos lo llevan a la comisaría.

Una vez en la oficina del comandante Marco Rojas Vargas y en presencia de los efectivos en mención, “Jhon Chivo” narra la conversación con el oficial, quien le dice:

“Te estoy salvando la vida, tengo la información de que te van a matar; si quieres seguir teniendo la protección de nosotros vas a tener que colaborar dando información que nos entreguen los vehículos que se roban en Zarumilla, a lo cual yo respondí que iba a cooperar en todo lo que se me pidiera y desde ese momento cada vez que se robaban una moto los policías antes mencionados me llamaban, si es que sabía algo de esa moto robada, y si lo había robado alguien de la organización yo se lo entregaba y después me enteré por medio de los agraviados que ellos (los policías) cobraban para rescatar la moto”, cita textualmente el fiscal a la declaración de alias “Jhon Chivo”, el cabecilla de la organización.

Enseguida el fiscal alegó ante el magistrado Pedro Pablo Arévalo Rivas que de esta manera se advierte un alto grado de culpabilidad de los policías quienes se veían beneficiados económicamente.

COBRO. El letrado también acreditó su pretensión con la ampliación de la declaración del colaborador eficaz número 510-2016, quien refiere lo siguiente:

“En la comisaría de Zarumilla, cada vez que nos intervenían el policía Lenin Ventura Calmet, Víctor Márquez Mijahuanca, Luis Manuel Ayasta, Luis Santacruz, Roberto Ojeda Salas, Walter López, y el comandante Marco Rojas Vargas; cada vez que nos intervenían a un miembro de la organización nos ayudaban y mensualmente se les daba dinero a cada uno, la suma de 700 soles. Por ejemplo, el 9 de diciembre del 2016 me intervinieron junto al hermano de “Jhon Chivo” que responde al nombre de Jordy Rivera Pisfil alias “Jhordy Chivo”, en Zarumilla; nos intervinieron el suboficial Lenin Ventura Calmet, Marquez Mijahuanca, Manuel Ayastra Romero, Luis Santacruz Saavedra y Roberto Ojeda Salas, a mí me intervienen con una pistola Pietro Baret y a “Jhordy” con cuatro bolsas de marihuana tipo “pacos” y nos hacen ingresar a la comisaría de Zarumila en un patrullero por la parte posterior, esto es para evitar que por la puerta principal probablemente habían cámaras de videos y ser detectados y fuimos ingresados directamente al calabozo y ahí es que “Jordy” me dice que seguramente lo van a llamar a mi hermano “Jhon Chivo” y nos van a dejar libres y fue así que a los 30 minutos nos sacaron por la puerta posterior de la comisaría , por donde habíamos ingresado, y nos dejaron en libertad”, citó Rogelio Pita, lo dicho por el colaborador con código de reserva.

En ese sentido, el fiscal dijo que, entonces sí existen imputaciones concretas, que si bien es cierto no están a nivel de certeza, el Ministerio Público considera que sí tienen la suficiente fuerza para el nivel en que se encuentra la investigación.

“Considero que existe alta probabilidad acerca de la vinculación con la comisión del ilícito que se les investiga”, aseveró el fiscal.

Por su parte la defensa del comandante Rojas Vargas indicó que el Ministerio Público desconoce en qué momento su defendido pasa a ser comisario de esa jurisdicción, aduciendo que el propio informe de número 15 que ha utilizado como elemento de convicción, señala que su patrocinado ingresó a laborar en la comisaría en el mes de mayo del año pasado, hasta febrero de este año; y no en marzo como sustenta el fiscal.

Sin embargo, dijo que pese a que existen pruebas objetivas que ese hecho no pudo haber sucedido, su patrocinado ha indicado que con un ánimo de colaborar a la justicia, ingresó a la fecha a trabajar en la fecha dada por la Fiscalía.

En este sentido, el abogado manifestó “entonces lo sustentado no es un hecho nuevo ni relevante que presenta el fiscal y que solo es un informante, quien refiere lo supuestamente dicho”.

Por cuanto el abogado defensor apeló al juez del Juzgado de Investigación Preparatoria de Zarumilla, que los solo dichos no vinculan necesariamente a su patrocinado, con lo que se le pretende acusar, invocando al magistrado a desestimar los elementos presentados por el fiscal.

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