Okinoshima es una isla japonesa que podría sumarse a la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco. Si bien esto podría aumentar el turismo, ninguna mujer podrá visitarla.
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Okinoshima alberga el templo de Okitsu, que fue recomendada por el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios para integrarse a la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco, según el diario The Japan Times.
La isla es considerada un lugar religioso y tiene previsto sustentar en julio su sugerencia en una reunión que el Comité de este organismo realizará en Polonia.
Empero, los sacerdotes que la habitan no permiten la entrada de mujeres a la isla de 197 acres parte de la región de la prefectura de Munakata. Allí se encuentra el templo de Okitsu, que forma parte del Gran Templo de Munakata.
Okinoshima, fue hogar de numerosos ritos que involucraban antiguamente rezos para la seguridad de las embarcaciones y un comercio exitoso entre la Península de Corea y China. Sin embargo, en la isla se siguen cumpliendo "estrictos tabúes", incluyendo la controversial veda a las mujeres.
Eso sí, las visitas solo son permitidas el 27 de mayo, durante un festival en el que se "conforta los espíritus de los japoneses y rusos que fallecieron durante la Batalla Naval por el Mar de Japón cerca de Okinoshima en 1905", señala The Washington Post. Solo pueden estar en ella de manera permanente los sacerdotes del templo de Munakata.
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