Josué Pariona: “La Corte Suprema tendrá una renovación total en 2030”
Josué Pariona: “La Corte Suprema tendrá una renovación total en 2030”

La capacitación es una pieza clave para acceder a un ascenso y brindar al sistema judicial los cuadros idóneos que ayuden a resolver las controversias y casos complejos. Sin embargo, en la actualidad esta capacitación es financiada por cada magistrado, impidiendo, por temas económicos, que muchos logren ascender de manera profesional. En ese sentido, Josué Pariona, expresidente del Consejo Directivo de la Academia de la Magistratura, explica a diario Correo un proyecto de ley que podría modificar todo el panorama actual.

¿En qué consiste este proyecto de ley?

Hemos llevado al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos tres proyectos de ley. Uno de ellos se trata de la capacitación que llevan todos los jueces desde la primera instancia y que desean postular a un ascenso. Sin embargo, en la actualidad, para que cada juez se capacite, debe autogestionarse para acceder a la Academia de la Magistratura (AMAG), ya que es una preparación que sirve al momento de postular a una plaza en el Consejo Nacional de la Magistratura. El proyecto propone que esta preparación no solo sea obligatoria, sino que pueda ser financiada con recursos del Estado con el fin de lograr su completa descentralización.

¿Qué se quiere lograr con la aprobación de este proyecto? 

Dar al Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) una buena cantera de postulantes capacitados para un cargo judicial. En el pasado se presentaron muchos colegas abogados que no cuentan con la experiencia necesaria. Es importante que todos los abogados lleven como requisito obligatorio el Programa de Formación de Aspirantes (PROFA), para que cuando postulen a una plaza, ya cuenten con la pericia necesaria y no aprendan en el camino, que es lo que viene pasando, donde cada siete años inician un proceso ratificatorio.

¿En qué consiste ese proceso? 

Es una evaluación de conducta y de medidas disciplinarias. Muchos presentan antecedentes hasta el cuarto año, porque justamente estaban aprendiendo bajo ensayo y error. En otros países, como España, para ser magistrado se debe ir a la Escuela Judicial Española, pero deben pasar por una preparación previa que puede tomar de 3 a 4 años. Se da un balotario de suficiencia, se ingresa si se aprueba y se estudia durante 2 años.

¿Cuánto sería el presupuesto para la implementación de este proyecto de ley?

Tendría que hacerse un estudio, ya que se desconoce la demanda de jueces y fiscales que pueden acceder a la AMAG mediante esta modalidad. Se debe pensar en el futuro, porque la Corte Suprema tendrá una renovación generacional total en 2030. Para el 2021 saldrá un tercio, y de ahí irán saliendo de tercio en tercio, ya que la edad de jubilación es a los 70 años.

Desde su creación, ¿cuánto se ha avanzado en la AMAG? 

Tenemos en total 11 sedes descentralizadas ubicadas en Cajamarca, Ucayali, Puno, Iquitos, entre otras ciudades. Esperamos para este año implementar la sede de Piura, Tacna, y está por crearse la de San Martín. Por otro lado, se brinda tres programas de formación académicas permanentes, uno es el de Capacitación para el Ascenso (PCA), el de Actualización y Perfeccionamiento (PAP) y el de Formación de Aspirantes (PROFA), además de cursos y talleres. En promedio se preparan a 5 mil personas a nivel nacional al año.

¿Existen requisitos en el caso del PROFA? 

Claro, para ser juez supremo, se debe contar con un mínimo de 10 años de experiencia como juez superior titular. Cada instancia tiene sus años establecidos como requisito para postular. Esto está establecido en la Ley Orgánica de la Academia de la Magistratura, y cuando se trata de jueces supremos y fiscales supremos, se rige conforme a la Constitución Política del Perú.

¿Cuáles son los problemas que aún no se resuelven dentro del Poder Judicial?

La famosa carga procesal. Somos un pueblo muy litigioso; es decir, si el juez de primer instancia da una sentencia y es confirmada por la sala superior, las personas no están conformes y deciden ir hasta la Corte Suprema. Al final todo llega hasta aquí, generando más carga. Nunca están satisfechos con el fallo.

¿Y esto de quién depende? 

Yo creo que los señores abogados deben poner su cuota, porque ellos son los primeros que reciben a la persona cuando tiene un problema judicial, ellos conocen el Derecho y saben hasta dónde se puede avanzar. En otros países, los abogados de ambas partes se reúnen, hay conciliación y ahí queda.

DATO

Josué Pariona. Juez titular de la Corte Suprema de Justicia. Estudió Derecho en la Universidad Nacional Federico Villarreal. Expresidente del Consejo Directivo de la Academia de la Magistratura.

1993 fundación de la AMAG por el artículo 151 de la Constitución Política del Perú.

11 sedes descentrali-zadas tiene la Academia de la Magistratura.

mil profesionales se capacitan allí a nivel nacional.