La Fiscalía boliviana admitió una denuncia del Gobierno por supuesto racismo y discriminación contra la diputada opositora Norma Piérola, que se negó a saludar al presidente Evo Morales durante un acto oficial.
Según la diputada, la demanda fue presentada ayer por el viceministerio de Descolonización ante la Fiscalía de Distrito de La Paz, que acusa a la diputada por los supuestos delitos de "incitación pública al racismo, discriminación y actos irreverentes contra un primer mandatario".
Dijo que lo que más preocupa es la celeridad encomiable con la que se actúa cuando se trata de persecución política, en alusión a que la demanda fue admitida y aceptada en la fiscalía en una hora.
Piérola ejerció como diputada en la actual gestión parlamentaria por la fuerza opositora Convergencia Nacional y fue reelegida en los comicios generales celebrados en octubre pasado en representación del también opositor Partido Demócrata Cristiano.
La parlamentaria se rehusó el último lunes a estrechar la mano a Evo Morales durante el acto en el que el Tribunal Supremo Electoral entregó las credenciales a las autoridades electas en octubre.
Morales dijo que respeta la actitud de Piérola, pero las diputadas o senadoras de su propio partido sí "son educadas".
Félix Cárdenas, viceministro de Descolonización, justificó el proceso en contra de la diputada debido a que "es una autoridad y todo lo que haga es visto por la ciudadanía".
EFE