Periodista sueca fue descuartizada y arrojada al mar Báltico

Ayer un ciclista halló el torso desmembrado de un mujer en las playas de una isla de Suecia. Hoy la policía danesa confirmó que los restos humanos pertenecen a Kim Wall, reportera danesa que desapareció el pasado viernes 11 luego de que se subiera a un submarino artesanal para obtener su historia y la de su creador.

Peter Madsen, constructor del submarino y principal sospechoso del crimen, fue detenido por la policía luego de que cambiara su versión de los hechos. Primero dijo que desembarcó a la periodista en una isla cercana a pedido de ella, pero luego aseguró que Wall falleció accidentalmente dentro del sumergible y arrojó su cuerpo al mar.

Kim Wall contactó a su presunto asesino para hacer un reportaje sobre el peculiar inventor -quien ahora quería hacer cohetes espaciales- y su singular aparato. Madsen es creador de la compañía Copenhagen Suborbital, con la que logró despegar con éxito cohetes experimentales no tripulados.

La Policía contrastó los rastros de AND que pudo encontrar en la casa de la reportera con el torso encontrado y rastros de sangre en el submarino.

"Hemos comprobado el ADN. Cuando visitamos a su familia el sábado 12 de agosto para decirles que no la habíamos encontrado en el submarino tomamos muestras de un peine y un cepillo de dientes, fue lo que pudimos encontrar ahí que tuviera su ADN. Ayer lo contrastamos con el torso encontrado. Es la misma persona. También coincide con la muestra de sangre encontrada en el submarino", indicó Jens Moller, portavoz de la Policía de Copenhague.

La periodista de 30 años había trabajado para las publicaciones The Guardian y The New York Times. Ahora la investigación se centra en qué pasó dentro de ese submarino y qué llevó a Madsen a cometer tan cruel crimen.