Más de 20 partidos políticos tienen la posibilidad de participar en el próximo proceso electoral. Posiblemente cuatro de ellos logren un resultado positivo que les permita lograr representación parlamentaria y solo uno llegará al Poder Ejecutivo.

No hay hasta la fecha un claro líder que sea depositario de la confianza del electorado. Por el contrario, de acuerdo con los sondeos, existe mucha decepción con relación a los principales participantes, quienes enfrentan acusaciones de la justicia.

Mientras los que se sienten más seguros desarrollan sus campañas, el pueblo espera la aparición de un político que asegure un gobierno honesto y transformador. Ninguno de los favoritos de la multimedia parece convencer al electorado. El “roba pero hace obra” parece no dar para más. Un outsider aún es posible, aunque a varios periodistas de la multimedia les parezca descabellado.

Recordemos que Ollanta Humala se despuntó contra la voluntad de los principales medios, quienes lo atacaban sin piedad en la campaña pasada. El pueblo lo eligió pese a que el favorito de la multimedia fue PPK. El escenario político puede cambiar mucho en los próximos meses si los que tienen derecho a participar juegan bien sus cartas.

La gente está harta de lo mismo y el statu quo parece no ser sostenible. Aquel que logre representar a un pueblo lleno de esperanza puede convertirse en el próximo presidente del Perú.

Para ganar es necesario contar con una marca de buena recordación, con una historia personal rica e interesante y con las ganas y la energía para una dura campaña.