Cuatro regiones del centro se ubican entre las diez primeras en el ranking de avance presupuestal para obras en los primeros seis meses de gestión. En el número uno se ubica el Gobierno Regional de Ayacucho con una ejecución de gastos de 52.1 por ciento. Una de las razones es que el actual gobernador, Wilfredo Oscorima, cumple su segundo mandato consecutivo y le dio continuidad a muchos proyectos. El problema es que el futuro es incierto para esta región ya que Oscorima ha sido sentenciado con 5 años de prisión efectiva por delito contra la administración pública. Además se le inhabilitó 3 años a ejercer cualquier cargo público.

Huánuco es el tercero con 41.4 por ciento, gracias a una autoridad regional que trabaja con dinamismo y eficacia. Huancavelica es el sexto con 37.4 por ciento y Pasco es octavo con 37.1 por ciento.

La región que está relegada es la de Junín. Se ubica en el puesto 14 y su ejecución presupuestal ha sido de 28.5 por ciento de un total de 234 millones 10 mil 336 nuevos soles. Esto ha generado una serie de críticas al gobernador regional y sus funcionarios. Los opositores han dicho que esto causa preocupación porque se está ejecutando de acuerdo al cronograma, obras debidamente programadas y presupuestadas por el gobierno central.

Lo cierto es que el actual gobierno regional de Junín inició su ruta en medio de muchas pugnas y disputas con la anterior gestión. No hubo transferencia y en el proceso de partir de cero se perdió mucho tiempo.

El asunto es que por estas fricciones políticas no se avanza. Esperemos que el gobernante regional le dé prioridad a la demanda de grandes obras para Junín y deberá demostrar que además de decirlas, puede hacerlas.