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“Qué nos pasa” era un programa de la televisión mexicana que a diario inquiría con humor y sátira a la sociedad azteca para intentar una solución a problemas coyunturales como el letargo y la desidia. Pues, eso mismo nos preguntamos nosotros, los peruanos.

Qué diablos nos pasa para no advertir que estamos a punto de perder la sede de los Juegos Panamericanos Lima 2019. Somos presa de un alarmante desdén que alcanza al gobierno central y a la misma municipalidad capitalina.

Mientras el alcalde Luis Castañeda está más mudo que nunca sobre este tema cuando fue él quien, incluso, recibió a toda sonrisa (je,je,je,je) la posta en Toronto, PPK parece andar más preocupado en sus facultades legislativas y en los disloques humorísticos. Y así no es.

Ya tiró la puerta y se marchó el presidente del comité organizador, Luis Salazar, acusando presiones de toda índole, lo que implica un obstáculo más en la casi inexistente construcción de la infraestructura deportiva que debemos exhibir obligatoriamente para la justa panamericana.

Para aplacar un tanto las iras, el ministro de Educación, Jaime Saavedra, al toque presentó a Carlos Neuhaus como nuevo director ejecutivo de los Juegos, pero lo que la gente quiere saber es si estamos en la capacidad de honrar este compromiso al que le pusimos la firma con bombos y platillos en 2013.

El excongresista Daniel Abugattás, a quien no le pesa la lengua para cantar verdades, ha sugerido que “lo más saludable sería renunciar a la localía” porque, además de la parsimonia en levantar la logística necesaria, el IPD y el COP están inmersos en una carrera para saber cuál comete más irregularidades.

Nosotros comulgamos con lo que profesa el también excongresista Alberto Beingolea: “Si nos unimos la gente del deporte, dejamos de pelear, el gobierno ayuda y comenzamos ya, aún podemos sacar adelante estos Juegos”. Santa palabra. No podemos tirar la toalla derrotados por la inoperancia. Es una cuestión de honor, si se quiere.

En buena cuenta, dejemos de ser olímpicamente irresponsables y pongamos a andar los Panamericanos Lima 2019, que ya están a la vuelta de la esquina. El nombre de Lima y el prestigio del Perú están en juego.

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