La censura del gabinete Ana Jara se debió al uso particular de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI), que se dedicó a hacer “reglajes” y acopio de información de cuanto personaje sea incómodo para el gobierno de Ollanta. El futuro de los implicados puede verse reflejado en el caso “las chuzadas” en Colombia, donde la Corte Suprema ha dado una sentencia el viernes 27 de febrero.

Lo que ha determinado la Corte Suprema es: 1) hubo un plan criminal ejecutado por el Departamento de Administración de Seguridad (DAS) durante el gobierno de Álvaro Uribe para espiar -sin justificación legal- a “sectores legítimos”; 2) el plan se ejecutó para defender “intereses personales”. Sin embargo, se subraya que el DAS cumplió siempre órdenes del Ejecutivo; y 3) María del Pilar Hurtado (directora del DAS) y Bernardo Moreno (exsecretario de la Presidencia) son los funcionarios de más alto nivel condenados hasta el momento. Sin embargo, hay indagaciones sobre la actuación del exsecretario jurídico Edmundo del Castillo y el exsecretario de Prensa César Mauricio Velásquez.

El fallo considera que los exfuncionarios impartieron órdenes ilegales cuyo cumplimiento significó actividades “arbitrarias, abusivas e injustas”. Entre las víctimas se tienen a los propios miembros de la Corte Suprema, Gustavo Petro (alcalde de Bogotá), al periodista Daniel Coronell, al abogado Ramiro Bejarano, al exmagistrado César Valencia y a la excongresista Ydis Medina. Todos los mencionados tienen en común el haber sido considerados opositores a la administración Uribe.

En los últimos 5 años ya se han condenado a 20 funcionarios por el escándalo de “las chuzadas”. Entre ellos al exjefe de Contrainteligencia del DAS (8 años), exsubdirectora de Operaciones del DAS (4 años), el exsubdirector de Inteligencia del DAS (10 años). ¿Ese es el futuro que le depara este escándalo a Ollanta y Nadine?