Vamos con un poco de joda. En una eventual entrega del Óscar en nuestro país, la estatuilla a mejor actor de reparto va, sin ninguna duda, para Odebrecht. Y quien subiría a recibirlo sería Barata, acompañado por Garreta y Favre.

El Óscar a la mejor edición de sonido tiene dueño seguro: Miguel Sifuentes, el exadministrador de la Clínica Osteoporosis, que grabó a Jorge Moreno en pleno “negociazo” en el mismísimo Palacio de Gobierno.

Si del Óscar al mejor guion adaptado se trata, el favorito es Ollanta. Mientras Pedraza alega que se trata de “aportes de corte político”, el expresidente dice que no reconoce “como ciertas” las declaraciones de Barata sobre la entrega de tres millones de dólares a Nadine.

El Óscar a la mejor fotografía (publicada por Correo) se lo llevan Meche y Vizcarra. Aparecen bien chéveres flanqueados por el mandamás de Kuntur Wasi, Carlos Vargas Loret de Mola, empresa que ahora quiere alzar vuelo con Chinchero. PPK aplaude a rabiar.

Keiko no tiene competencia para el Óscar a mejor banda sonora. Ha afinado muy bien a su bancada y quien entona las melodías en contra de las propuestas del Ejecutivo son Galarreta y Becerril. La Chacón también se suma al soundtrack.

Para la estatuilla al mejor montaje, el favorito es Toledo. Nos hizo cholitos con que su amigo Maiman y la suegra corrieron con sus gastos y gollerías, pero -según la denuncia fiscal- Odebrecht le suministraba religiosamente su coima durante tres años, hasta llegar a los $20 millones.

El Óscar a mejor película lo gana Mariano González, el exministro de Defensa, por su papel en “El único delito que he cometido es haberme enamorado de una hermosa mujer”. La escena más conmovedora es cuando besa a su asesora como un chibolo enamorado en plena calle.

El Óscar al mejor maquillaje recae sobre “Techito” Carlos Bruce, quien apeló a su influencia parlamentaria para pedir carros y policías como vigilantes en la inauguración a todo dar de su restaurante en la playa. Después maquilló el asunto con un mea culpa tardío.

Y, claro, el más esperado de todos es para Keiko Fujimori; no, perdón, hubo un error, el premio va para PPK. No cabe duda de que Fujimori fue la “La La Land” de las elecciones.