¿Por qué razón el Estado Islámico perpetra atentados contra un país como Irán que es musulmán como ellos, tal como acaba de hacerlo contra el Parlamento iraní y el mausoleo del ayatola Jomeini, líder de la Revolución Islámica de 1979 que acabó con el último Sha de ese país? ¿No era que solamente atacarían a Occidente? También lo hicieron contra el barrio chiita de Sayeda-Zeinab, Siria (abril, 2016). Atendamos que el Estado Islámico es sunita, mientras que Irán es un país chiita. Lo voy a explicar. Existe una milenaria rivalidad entre chiitas y sunitas -las dos ramas principales del Islam- que no se ha detenido desde la muerte de Mahoma, su profeta mayor, en el 632 d.C. Sus seguidores lidiaron por el liderazgo de su sucesión, comenzando la historia de la división en la idea de formar el gobierno del Califato islámico. Los chiitas creen que debe serlo un familiar de Mahoma -Alí, su primo y yerno- por designación de gracia divina. Los sunitas, en cambio, consideran que el sucesor debe ser elegido por la mayoría de la comunidad musulmana -su histórica figura fue Abu Bakr, suegro de Mahoma-, conforme los extractos de la Sunna, libro sagrado que contiene las palabras de los profetas y sus seguidores, de allí que se denominen sunitas. Estos, que son mayoría, representan alrededor del 87% de musulmanes en el mundo (cerca de 1500 millones), mientras que los chiitas llegan al 13%. Países sunitas son Arabia Saudita, Afganistán, Pakistán, Kuwait, Yemen, Egipto, Túnez, Libia y Turquía; mientras que entre las naciones chiitas se cuenta a Irán, Irak, Siria, Líbano y Palestina. Las subramas sunitas más relevantes son los wahabitas (salafitas); mientras que las chiitas reconocidas son los imamíes, alauitas, ismaelitas y zaidíes. Los grupos extremistas islámicos que no son parte de la religión del Islam también se confunden entre sunitas (Al Qaeda, Talibán, Estado Islámico, Hermanos Musulmanes) y chiitas (Hezbolá, Hamás). Asunto muy complejo.