Jorge Nieto Montesinos: “Estamos en un proceso de distensión”

Esta semana, el ministro de Defensa, Jorge Nieto, estuvo en Piura reconociendo el trabajo efectuado por el personal de las Fuerzas Armadas en la zona afectada por el Niño costero, y luego viajó a la provincia de Ayabaca para repartir cinco toneladas de ayuda humanitaria, a fin de mitigar los efectos de las bajas temperaturas.

Hasta ese lugar, Nieto llegó en helicóptero acompañado del jefe del Comando Conjunto, almirante José Paredes, y los comandantes generales del Ejército, Luis Ramos, y de la Fuerza Aérea, Javier Ramírez. Fue en Ayabaca, a 2700 metros de altura sobre el nivel del mar, donde el titular de Defensa dio una entrevista a Correo.

Estamos por cumplir un año del gobierno del presidente Pedro Pablo Kuczynski. Haciendo un balance de su sector, ¿qué es lo más destacado? 

Leí una encuesta que señalaba que, para la población, la acción más destacada del Gobierno en este año había sido nuestra reacción para enfrentar a El Niño costero, y que había un alto grado de reconocimiento de esta acción. Yo coincido con la población. Empezó todo el 14 de enero, el domingo a las tres de la tarde, y dos horas después las FF.AA. estaban desplazadas.

¿Esta intervención de las FF.AA. quizá es parte de un replanteamiento de su rol en la sociedad peruana, más allá de un accionar netamente militar y más bien orientado ahora a apoyar a la población civil en casos de emergencia? 

Las FF.AA. siempre han hecho esta tarea. Hemos visto varias cosas. Primero la necesidad de ordenar todo el sistema de respuesta temprana, de tener una ley que integre el conjunto de organismos dedicados al tema. Muchas veces hay áreas en las cuales las responsabilidades se trasvasan. Hay necesidad de que los procedimientos sean más ágiles, más rápidos o que las órdenes fluyan con mucha más facilidad en la estructura del Estado. En eso la estructura vertical de las FF.AA. es muy eficiente para poder ejecutar todo lo que haga falta.

¿Y esto genera una necesidad de compras de equipos que más tengan que ver con estas acciones? 

Ha quedado demostrado que somos un país que requiere helicópteros…Claro, yo no quisiera hablar del tema, porque cada vez que digo que se requiere hay que entrar a un tema presupuestal. Lo que sí queda claro es que lo que hemos hecho, en cuanto a abastecimiento de ciudades en la sierra, difícilmente hubiera sido posible sin helicópteros. Por ejemplo, llegar a Huarmey ha sido complicado porque no tiene un puerto. Y al mismo tiempo se usaron otras capacidades que antes no teníamos, como el satélite, que fue muy criticado en su momento. Sin embargo, ha sido de utilidad, pues nos puso al tanto de varias situaciones. Nos permitió anticiparnos en algún caso a situaciones que se iban a producir. Algo importante es que logramos reorganizar muy rápido el COER Defensa, el cual se convirtió en un centro de comando, de dirección, de organización y de articulación.

El friaje es el nuevo reto tras El Niño costero. ¿Cómo vienen afrontando esta nueva urgencia de asistir a la población? 

Acabamos de estar en Ayabaca llevando ayuda. También hemos estado en toda la zona sur, empezando en Tacna, Tarata, Moquegua, Puno, en las zonas altas, y vamos a ir a Cusco. Hay ministros que están encargados de toda la logística en los distritos declarados en emergencia por las heladas, se han desplegado capacidades, se ha llevado ayuda. Asimismo, se ha desarrollado, ahí donde el Midis lo ha considerado, “casitas calientes”. Se ha llevado abrigo a la población.

El 28 de julio no solo es momento de rendir cuentas al país, sino también de hacer anuncios de lo que se viene. ¿Qué se puede esperar en el sector Defensa para los próximos 12 meses? 

Primero, la institucionalización. Sabemos que en el pasado ha sido motivo de debate. Hubo injerencia en el proceso de los ascensos y los pases al retiro. En este proceso, que se ha iniciado a comienzos de este año y que se concreta en los meses finales, se va a respetar escrupulosamente el cuadro de méritos que componen todos los oficiales del país durante todos los días del año con su propio esfuerzo, con sus propias capacidades, y ahí hay una línea de acción muy importante. En segundo lugar, tenemos un gran esfuerzo por la profesionalización de las Fuerzas Armadas, institución que hoy tiene que hacer tareas que antes no existían o no estaban presentes, como todo lo que tiene que ver con la ciberdefensa y el desarrollo de las capacidades en esta área. En tercer lugar tenemos una tarea de modernización de las FF.AA. Tuvimos el primer día de julio una reunión del Consejo de Defensa y Seguridad en la que se aprobó un plan estratégico a 20 años para que nuestras FF.AA. tengan el diseño de capacidades que permitan sostener la defensa del país, de modo que tenemos ya un mapa, una guía estratégica que nos permita orientar el desarrollo de las capacidades de acuerdo a un plan, y eso es muy importante porque eso no existía.

Tema político. El ministro de Defensa es el más “político” en un gabinete de “técnicos”. Por eso, cabe preguntarle cómo ve usted el panorama político caracterizado por la crispación constante entre el Gobierno y la oposición. 

(Sonríe) Bueno, eso de que el ministro de Defensa es el más político es una coquetería que se ha hecho usual, pero no creo que corresponda con la realidad. Yo más bien observo que, desde la reunión entre el presidente Kuczynski y la lideresa de la oposición, ha habido un proceso de distensión general que está haciendo que comience a verse con expectativa la posibilidad de entrar a una fase en la cual se desarrollen reformas que se necesitan para sostener el Gobierno. Claramente, el primer resultado es el nombramiento del contralor en un proceso que usualmente hubiera durado varios meses, pero hoy se ha resuelto pronto, muy pronto.

Del 28 de julio en adelante, ¿cómo ve usted la relación entre Gobierno y oposición?, que, quieran o no, tienen que trabajar juntos y encontrar soluciones a muchas dificultades… 

Vemos hoy un conjunto de conflictos internos dentro de los partidos, casi cada partido tiene su pequeño remezón interno. Pero, por otra parte, son también situaciones naturales en un sistema político, pues en cada partido los procesos son diferentes, así como las formas de afrontar sus diferencias. ¿Qué hilo recorren estas diferencias? Es difícil verlo, porque son varios escenarios, es un mosaico complicado, pero en todo caso lo que tenemos por delante como país es una persistente lucha contra la corrupción. Necesitamos seguir en eso, salir de un momento en el cual empresas con gran poder de corrupción habían copado unas áreas de la obra pública con todas las consecuencias que hemos visto en los últimos meses. Ahí hay un esfuerzo muy importante, pues tenemos que procesar eso. También hay que hacer el esfuerzo por recuperar los índices de crecimiento, pues hay un escenario que muestra señales favorables. Necesitamos que eso sea concretado, que se recupere la generación del empleo y junto con ello seguir con las tareas que a cada sector nos han sido asignadas.