Kleber Mendonça Filho, cineasta brasileño: “Me interesa mostrar el sexo como catalizador de vida”
Kleber Mendonça Filho, cineasta brasileño: “Me interesa mostrar el sexo como catalizador de vida”

El realizador brasileño Kleber Mendonça Filho estuvo en nuestra capital para presentar Aquarius (2016), su segundo largometraje, que participa en la competencia oficial de ficción del 20° Festival de Cine de Lima.

Protagonizado por la famosa Sonia Braga, el filme relata la historia de una viuda madura, excrítica musical, residente en una vistosa zona de Recife, que emprenderá una incansable lucha contra la empresa constructora que pretende obligarla a vender su departamento.

En El sonido alrededor (2012) había diversos puntos de vista. En Aquarius, el punto de vista es uno solo, el de Clara, la protagonista. Sin embargo, los espacios interiores de los condominios siguen siendo fundamentales en las dos. 

Cada película tiene su propia personalidad. El sonido alrededor tiene 14 o 15 personajes, Aquarius básicamente uno. Aquarius es una miniaturización de El sonido alrededor, pero a la vez la magnifica, la agranda. El tema del espacio en la primera era importante, en la segunda es la película. Aquarius es un filme sobre líneas muy demarcadas que se necesitan proteger. Clara quiere proteger su territorio y la constructora quiere invadir. La película termina siendo un relato sobre un lugar cercado, sitiado. En El sonido alrededor había un elemento de pesadilla, que en Aquarius es total.

Ha pasado de actores no tan conocidos en El sonido alrededor a la famosa Sonia Braga en Aquarius.

Cuando hago una película me gusta explorar distintas posibilidades. En la primera era un trabajo más experimental. Aquarius necesitaba de una actriz muy profesional, como Sonia, que es una estrella de cine. Además, me gustaba la idea de usar actores icónicos, muy conocidos, ídolos, en situaciones o caracterizaciones diferentes. Un ejemplo clásico es John Travolta en Tiempos violentos (Pulp fiction), quien reapareció después de muchos años.

La dirección de actores es relevante en ambas cintas. ¿Cómo la trabaja?

Conversando con ellos, mucho diálogo es necesario. Es difícil encontrar personas buenas para trabajar en una película. Intento hallar a un buen actor que sea también buena persona. En un filme sobre relaciones humanas es importante que los actores sean buenas personas. He tenido suerte en ese sentido.

¿Sonia Braga fue su primera elección para el papel de Clara?

Tuve la idea un poco tonta de pensar que iba a encontrar a una señora en el supermercado para integrarla en la película, pero no tenía ningún fundamento. Es un papel muy exigente. Cuando entendí eso, en una reunión de amigos un fotógrafo me sugirió a Sonia Braga. Leyó el guión y aceptó en menos de 48 horas.

Es un personaje muy rico que no se presenta así nomás...

Sonia halló en el personaje vínculos personales y políticos, y eso fue importante.

¿Fue fácil trabajar con ella?

Sí, porque entendió el guión perfectamente. Cuando eso sucede todo se vuelve fácil, fluido.

¿La mastectomía es digital? 

Sí, y tomó tiempo que quedara perfecta. En el pasado Festival de Cannes, una periodista italiana pensó que era real y felicitó a Sonia por haber tenido la valentía de mostrar su “mastectomía”.

Un tema importante en sus dos películas es la ilustración de la sexualidad. Pero en Aquarius el sexo es más explícito. ¿Por qué?

El sexo es parte de la vida y me interesa mostrarlo de la manera más natural. Para mí es importante que el sexo aparezca como elemento catalizador de vida.

Otro tema capital en Aquarius es la corrupción, de esos señores empresarios capaces de lo que sea para vencer a Clara

Durante la escritura del guión investigué sobre técnicas de administración de negocios y es muy chocante enterarse que dentro de ellas existen muchas formas de sabotear, de hacer del sabotaje algo legal. No van de frente, sino por el costado, por los lados, para lograr su objetivo.

¿Tiene algún proyecto en camino?

Sí. Tengo pensado empezar a filmar a inicios del próximo año una película que se llamará Bacurau. Va a ser un thriller de horror que ocurrirá en el futuro, un poco distópica. Voy a codirigir con un gran amigo, Juliano Dornelles, que es diseñador de producción. Posiblemente se estrene en 2018.