La industria editorial ha recibido un duro golpe producto de la pandemia mundial, no solo por tener librerías cerradas y ferias de libro canceladas, sino también por la inacción del gobierno ante el problema que afronta el sector cultural en general.

En entrevista con Correo, Fernanda Castillo, gerente editorial del Grupo Planeta Perú; Johann Page, gerente editorial de Penguin Random House en Perú; y Borja Estadella, gerente general del Grupo Editorial Océano, analizan el impacto que ha generado el nuevo coronavirus en su rubro y exponen las medidas que vienen adoptando para tratar de superar esta crisis.

Para Castillo, “la industria editorial va a sufrir mucho y muy largo” porque el mayor porcentaje de los ingresos está en la venta de los libros físicos. En ese sentido, Page añade que esto “producirá pérdidas en todos los eslabones de la producción y la puesta en marcha del libro”.

Planeta tenía planeado lanzar este año más de 120 títulos locales, pero eso no será posible. Ante este inconveniente, Castillo cree que “las editoriales van a aprovechar todo el catálogo que tienen en el almacén para hacer promociones porque son productos ya hechos”.

Sobre este punto, Estadella piensa que “habrá descuentos que van a ser negativos para el mercado, pues se va a dar una percepción de que el libro tiene un valor que realmente no tiene”. “Será una lucha titánica”, sentencia, “y los pequeños editores serán los más afectados y van a necesitar un respirador; algunos, lamentablemente, van a desaparecer”.

LLAMADO AL GOBIERNO. Castillo, Page y Estadella insisten en que el gobierno apruebe con urgencia la Ley del Libro para beneficiar al sector en su totalidad.

“Hasta ahora, el involucramiento del Ministerio de Cultura en la industria de libro y el fomento de la lectura, y en el sector cultural en general, ha sido mínimo”, apunta Castillo.

“La administración pública nos puede ayudar con licitaciones públicas, aplazamiento de temas tributarios y la Ley del libro, a ver si llegan a un acuerdo muy lógico para no perjudicar al cliente final con el IGV”, señala Estadella. “Todo eso puede ayudar a cumplir con las obligaciones y no caigamos en una crisis que nos haga desaparecer”, advierte.

En ese sentido, Page remarca que “el intangible del consumo de la cultura requiere una protección como la que establecen otros países” y que “se debe considerar como ‘bienes de primera necesidad’ a los productos culturales, brindándoles la inyección y liquidez necesarias para afrontar esta crisis”.

VENTA POR INTERNET. La venta de libros electrónicos en el Perú aún es muy precaria, pero ante la crisis por la pandemia la industria apunta hacia lo digital cada vez con más énfasis.

“Esto nos está obligando a evolucionar tecnológicamente a todos. Apuntar hacia lo digital es el reto”, piensa Castillo tras indicar que la venta por internet en Planeta significó el 2% del total de las operaciones en 2019.

Por su lado, Océano analiza “desarrollar un e-commerce directo que va a comisionar por proximidad”. “Es decir, si tengo a un cliente al lado de El Virrey de Miraflores, esta librería va a comisionar con esa venta. Así apoyo a mi cliente final y al intermediario”, explicó Estadella, quien cree que el libro físico todavía tiene para muchos años más.

Para Page, finalmente, “el mercado editorial y sus actores debemos comprender que esta coyuntura de pandemia lo que ha hecho es brindarnos la oportunidad de dar un salto cualitativo en cuanto al consumo digital; el mundo ha cambiado y debemos adaptarnos”.

VISITAS CANCELADAS. Para este año se esperaba las visitas de Guillermo Arriaga (Premio Alfaguara de Novela 2020), Carla Guelfenbein (Premio Alfaguara de Novela 2015), Luis José Luis Peixoto, Jhumpa Lahiri, Javier Cercas (Premio Planeta de Novela 2019), Javier Moro, Manuel Vilas, Santiago Posteguillo, J.J. Benítez, Walter Riso, Pilar Sordo, Gabriel Rolón, Pedro Mairal, entre otros.