La directora de Información de la agencia EFE, Soledad Álvarez, llega a Lima para participar en el foro "Prensa y Mujer: qué contar y cómo contarlo". En conversación con Correo, destaca la necesidad de incorporar la igualdad de género en las redacciones, así como las exigencias que deben cumplir los medios de comunicación ante la proliferación de las fakenews.

¿Qué rol asume una agencia de noticias cuando el impreso desaparece y la web se impone ante la necesidad de información?

El escenario de la información ha cambiado radicalmente. La revolución tecnológica tiene mucho que ver con eso (...). Las nuevas generaciones ya no usan el papel, se informan desde teléfonos, desde tablets, o consumen contenido muchísimo más audiovisual. Por eso la agencia hace un esfuerzo de reestructuración para adaptarse a esos contenidos y enfocarnos hacia un formato exclusivamente multimedia.

¿Cómo combaten la desinformación y las fakenews?

La desinformación y las fakenews no son un fenómeno nuevo; la revolución tecnológica, la aparición de las redes sociales, el acceso a internet propician una mayor viralidad de los contenidos; y también ha cambiado el flujo de la información. Las noticias falsas se combaten con la esencia del buen periodismo: yendo al origen de la información, contrastando fuentes. Debemos recuperar la credibilidad ante nuestros consumidores para que sepan que, dentro del ruido que hay en las redes sociales, pueden confiar en que hay informaciones suficientemente contrastadas.

¿Para esa labor también está el fact checking?

Nosotros hemos creado e impulsado nuestra propia unidad de verificación de datos, que se llama EFE Verifica, y hemos comenzado a verificar informaciones que se producen en el discurso político fundamentalmente. Nuestra aspiración es crecer y aprovechar toda nuestra red internacional, sobre todo en América Latina, para llevar esa labor de verificación a contenidos en los países en los que estamos presentes.

A su criterio, ¿a qué responde la ola de indignación que surgió en países de América Latina?

La región propiamente vive un cambio de ciclo en muchos sentidos. Pero me gustaría poner el enfoque en el papel de los jóvenes. Aunque en cada país el detonante es distinto, el punto en común es la pérdida de confianza en las instituciones.

¿Cómo hacer periodismo con enfoque de género?

Los medios de comunicación deben asumir que el periodismo con enfoque de género no es una opción, es una obligación. (...) Estamos obligados a hacer formación continua dentro de nuestras redacciones. Para mí, el enfoque de género en el periodismo es transversal, el enfoque de género tiene que estar presente en las redacciones y en cada periodista.

¿Cómo le damos cabida a un análisis de este tipo en el día a día?

Es que el enfoque de género en el periodismo, y en otros ámbitos de la vida, debe ser una cultura transversal. No reivindicamos el predominio de la mujer sobre el hombre, reivindicamos una cultura de igualdad, donde todos tengamos las mismas oportunidades, y eso lo tenemos que construir entre hombres y mujeres.

¿La cobertura de estos temas puede variar de acuerdo al país?

Es posible. Uno de los cambios que se puede propiciar es tener diversidad en los contenidos (...). Tenemos que acostumbrarnos también a no tratar exclusivamente a las mujeres como víctimas, sino también al papel activo y los aportes que han dado en diversas ocasiones.

¿Alguna recomendación?

Se están produciendo muchas experiencias interesantes en diferentes medios de comunicación para impulsar esa cultura de la igualdad, y las nuevas tecnologías nos dan la oportunidad de compartirlas. También debemos instar a las empresas periodísticas a que nos ayuden a romper el techo de cristal que todavía tenemos las mujeres periodistas para acceder a puestos de responsabilidad en las redacciones. Las redacciones están llenas de mujeres y en los despachos solo hombres, que son quienes deciden qué se cuenta, cómo y quién lo va a contar.

Perfil

Soledad Álvarez, periodista

Desde febrero de este año es directora de Información de EFE. Formó parte del Departamento de Televisión de la agencia en Madrid y del Área de Desarrollo de narraciones en vivo. Fue delegada en países como Bolivia y Cuba.