Gol de vestuario, como le conocen en el mundo del fútbol. Así llegó la primera alegría del Italia vs. Inglaterra en la final de la Eurocopa. Luke Shaw, marcador del cuadro que ejerce de local en el mítico estadio de Wembley en Londres, llegó como centrodelantero para definir dentro del área y firmar el 1-0 del partido en solo dos minutos.
La acción que hizo explotar a los miles de fanáticos en el coloso londinense empezó por el costado de Shaw. Precisamente es el jugador de Manchester United que, desde la banda, tocó el esférico para adelante para la aparición de Harry Kane. Enseguida, el delantero de los ‘Tres Leones’ levantó la cabeza para seguir con la jugada.
El capitán de los ‘Three Lions’, antes de cruzar la línea que divide la cancha, envió un servicio largo hacia el territorio de la ‘Nazionale’. Por ese costado se sumó en ofensiva Kieran Trippier, el otro de los laterales del elenco anfitrión. El hombre del Atlético de Madrid quedó frente a Emerson Palmieri y eligió enviar otro servicio.
El pase de Trippier se dirigió a la punta contraria, pasando los centrales de la ‘Azzurra’. Shaw, que siguió toda la secuencia desde su cancha, sacó un disparo en primera y hacia el primer poste para vencer al portero Gianluigi Donnarumma, quien pudo hacer poco para evitar el tanto en el certamen continental.
De esa manera, Shaw, que solo se perdió el duelo contra Croacia en el debut de la Eurocopa, ha señalado el camino de la selección de Inglaterra, que está participando en su primera final de la mencionada competición y busca su primer trofeo importante desde el conseguido en la Copa del Mundo de 1966.