Imagen
Imagen

Una mirada a la época dorada del vóley peruano. Hace 30 añoshizo historia en el deporte al conseguir la medalla de plata en las Olimpiadas de Seúl 88 formó parte de aquella selección blanquirroja, a cargo de Man Bok Park, que puso la valla o la net muy alta para las otras generaciones.

¿Qué recuerdos se te vienen a la mente al hablar de las Olimpiadas de Seúl 88?

Cuando se toca el tema de Seúl 88, son los recuerdos de Seúl; no es que esté todo el tiempo, en el día a día, pensando en lo que pasó. Fue una época maravillosa la que tuvimos, de experiencias en nuestras vidas y de resultados deportivos, pero es un recuerdo que nunca va a salir de nuestras cabezas.

Esa selección y la medalla de plata son uno de los logros más importantes del deporte nacional en los últimos 50 años. ¿Qué pasó? 

Son logros que lamentablemente no se consiguen muchos; hay contados con los dedos de tiro -en el vóley- porque otra medalla olímpica no ha habido, entonces siempre tendemos a recordarla. Si el deporte fuese de un mejor nivel, habría más cantidad de medallas. Si el deporte fuese más eficiente en nuestro país, tendríamos más logros como en otros países del mundo. Lo que se hizo en aquellos tiempos lo recordamos con muchísimo cariño y con mucho reconocimiento por la época en que se atravesaba: el terrorismo. Esa era la situación en la que se encontraba el Perú y el vóley era el que regalaba las alegrías. También era una alegría para nosotros haber sido consagradas y haber logrado eso. Obviamente se sumaba a la afición del Perú.

¿Por qué crees que el método de Mr. Man Bok Park fue tan criticado si dio buenos resultados para la época?

Cada uno tiene su metodología de enseñanza. La disciplina es fundamental en cualquier deporte. Sin ella, no tienes nada, no puedes consagrarte en nada, eso es lo fundamental para tener éxito. Sin disciplina, no cumples con los horarios, no hay aceptación del técnico, no cumples con las exigencias que te manda el entrenamiento. Todos sabemos el significado de esta palabra: es abocarte a eso, soportar buenos tratos, malos tratos, indiferencias, peleas... mil cosas. El deporte te hace enfrentarte a un rival; la vida te hace enfrentarte a mil cosas y si uno está formado bien, tiene la capacidad para poder aceptar todo: lo bueno, lo malo, las críticas. Él vio que nos podíamos adaptar a su educación, a su manera de ser y a entrenar las ocho horas que él quería. Si no entrenabas, no figurabas.

¿Por qué, luego de Seúl 88, el voléy peruano no creció?

El vóley en esa época era distinto. Las chicas en la actualidad te pueden decir que sí se entregan, que sí vienen a entrenar, que se concentran y aguantan un montón de cosas, pero es distinto, es otro tipo de entrega. Somos otro tipo de jugadoras, teníamos otras capacidades, otras habilidades deportivas. Éramos un fenómeno, como dicen, y los fenómenos ocurren esporádicamente, después de muchos años.

Como deportistas, uno siempre va a querer lograr sus objetivos, entonces ¿por qué el vóley peruano actualmente no sobresale?

Hay que sentir lo que haces, el dolor. Creo que para hacerte fuerte tienes que sentir todas las cosas malas que te pueden pasar, al sentir eso (obviamente no te gusta) te haces más fuerte, luchas contra eso. O sea, no me gusta que me grites, entonces voy a hacer lo contrario para que no me grites. Hoy en día, no. Me gritó, te humillé, dejas de hacer las cosas por vergüenza, por falta de personalidad no afrontas una situación. Nosotras nos enfrentábamos a todo, entre nosotras mismas, pero a la hora que salíamos a la cancha a jugar, yo me olvidaba si alguien no me saludó en la mañana, pero al día siguiente yo no te saludaba. Entras en un tema de conflicto, de rivalidad, ves quién puede más y eso había, “¿quién va a jugar mejor que yo?”, pero nos llevábamos bien. Llegábamos a buscar lo que queríamos. Yo conseguí muchas cosas; Cecilia Tait, otras cosas; Gaby Pérez del Solar, otras; Denis Fajardo, otras; Cenaida Uribe, otras; Gina Torrealva, otras; pero al final queríamos llegar a lo mismo y eso ocurrió.

Perfil

Natalia Málaga es entrenadora de la selección peruana. Adoptó las enseñanzas y disciplina de Mr. Man Bok Park y las practicó en las selecciones que le tocó dirigir y obtuvo buenos resultados. 

TAGS RELACIONADOS