Con el marcador abajo, la selección peruana inició la segunda mitad con el objetivo de buscar la igualdad que otorgue la tranquilidad necesaria para ir luego por los tres puntos.
Con el ingreso de Jefferson Farfán, el equipo de Ricardo Gareca buscó ser más ofensivo y logró arrebatarle el esférico al equipo galo.
A los 50' la selección peruana creo una jugada de ataque que terminó con un violento disparo de Pedro Aquino que terminó chocando en el poste del portero Hugo Lloris.
El disparo del volante nacional tomó efecto en el aire he hizo saltar de sus asientos a los hinchas peruanos, pero lamentablemente el balón se estrelló vértice del arco de Francia.