Alza de tasa del Impuesto a la Renta generaría un efecto contraproducente, señalan especialistas

El presidente del Consejo de Ministros, Walter Martos, se refirió a la posibilidad de incrementar el Impuesto a la Renta y otros tributos. Comentó que el tema aún no ha sido evaluado por la ministra de Economía, María Antonieta Alva, ni con otros miembros del gabinete.

“Ella [Alva] tiene una mirada estratégica de todo el manejo económico del país y presentará las recomendaciones más adecuadas para tomar las decisiones que corresponden en el momento que estamos viviendo”, respondió el primer ministro en entrevista con Canal N.

¿Es el momento de un alza de los impuestos? ¿Cuál sería el momento ideal? Al respecto, Jaime Escribens Olaechea, profesor de Derecho Tributario de la Universidad del Pacífico y socio del Estudio EVVG Abogados, comentó que los impuestos miden básicamente la riqueza de los particulares, la que vas generando, como en el Impuesto a la Renta; la que vas usando, como el Impuesto Selectivo al Consumo o IGV; y el impuesto patrimonial, a los inmuebles, predial o ITAN.

“En general, viéndolo desde el punto de vista económico de política fiscal, si un país tiene una caída del 15% de su PBI, no va a haber riqueza generada, las empresas no van a declarar ganancias en el IR, incluso muchas han quebrado o van a tener pérdidas”, explicó Escribens.

Por otro lado, el consumo se está retrayendo. Lo único que quedaría es el impuesto patrimonial, que ya fue descartado por la propia titular del MEF. Por ello, el tributarista no ve mucho campo de aplicación o margen de maniobra por parte del Ejecutivo.

Otro punto clave, añade Escribens, es que el IR es un tributo de periodicidad anual, y la Constitución establece que cualquier cambio del IR solo será aplicable a partir del próximo año, vale decir del 2021. Esto sumado a que el Ejecutivo no tiene facultad originaria para subir o bajar tributos, el encargado es el Congreso, a menos que delegue facultades.

“Por más que suba a 40% el IR, si la empresa da pérdida, no va a haber ningún monto mayor a pagar. En Chile, por ejemplo, están sacando medidas para reactivar la economía, entre ellas, medidas tributarias. Lo que sabe la ministra es que no solamente es una fuente de generación de ingresos al Tesoro Público, sino que también es una herramienta de reactivación de la economía”, apuntó el docente.

Por su parte, el tributarista Dante Sanguinetti, socio de Philippi Prietocarrizosa Ferrero DU & Uría, argumentó que lo mejor en momentos como el actual es seguir lo que recomienda la OCDE, el FMI y lo qué están haciendo los otros países, dependiendo de los resultados que obtengan.

Indicó que si bien el premier Martos no ha profundizado en el tema, en el plano de la especulación sería una salida facilista para recaudar levantar la tasa del IR, o del impuesto predial, o imponer un impuesto patrimonial.

“Lo que se necesita es eliminar trabas de inversión y de empleo. Si uno piensa que por un tema de recaudación rápida subes la tasa del IR, lo que vas a hacer es desincentivar la inversión y las personas probablemente inviertan en otros países”, precisó Sanguinetti.

Ante la posibilidad de un impuesto temporal, el tributarista sostuvo que ya se ha demostrado en el país que lo temporal se vuelve permanente. Recalcó que este no es el mejor momento para crear más impuestos, cuando el mercado está completamente mermado.

Sanguinetti evaluó la posibilidad de cuando entremos en una etapa de consolidación, se podría pensar en un impuesto a la herencia, al patrimonio neto sobre una base adecuada, o en un impuesto ambiental, mirando ejemplos de la región.

¿Y LA CAJA FISCAL?

Debido a todos los gastos en los que ha incurrido el Estado, la Caja Fiscal está saturada. Lo único que quedaría sería el endeudamiento, señala Escribens. “Perú felizmente tiene un buen posicionamiento en el endeudamiento, ha emitido bonos a una tasa muy baja, además”.

El especialista propone que así como las empresas recurren a créditos de Reactiva Perú, el Estado también podría apelar a financiamiento, porque con los impuestos como están, sin subirlos, la recaudación va a ser muy poca.

“Esto se debe a que ha bajado el consumo, baja el IGV, y va a bajar el Impuesto a la Renta a fin de año. No se puede aplicar tributación sobre aspectos de la economía como el consumo, ingreso y rentas, que están deprimidos”, señaló.

AMPLIAR LA BASE

Dante Sanguinetti subrayó que esta situación amerita revisar estructuras. “Sugeriría ampliar la base tributaria, eliminar las exoneraciones, y combatir de manera mucho más eficaz la elusión y evasión de impuestos”.

Añadió que al ampliar la base tributaria más personas pasan a la formalidad, y de paso combates la evasión y también la elusión, a través de normas antielusivas, y lo que terminas haciendo es que las personas paguen lo que tengan que pagar.

En esa línea, argumentó que es importante eliminar exoneraciones y digitalizar Sunat. Al final, “el sector privado es el que nos va a sacar de este hoyo, el empresariado se va a reactivar y nos va a sacar de esto. Las prioridades deben ser generar caja y proteger los puestos de trabajo”, reflexionó.