Arnd Beck: "Invertiremos en proyectos con sello de acción climática"

La reducción de los impactos ambientales para afrontar la crisis climática no le compete solo a un país, por lo que la Unión Europea, junto con los ministerios de la Producción y del Ambiente del Perú, organizó del 12 al 13 de setiembre el I Foro de Economía Circular, donde reunió a funcionarios gubernamentales, empresarios y especialistas como Arnd Beck, jefe de la Oficina para América Latina del Banco Europeo de Inversiones. A diferencia de la banca comercial, este organismo prioriza los indicadores sociales y ambientales de cada proyecto.

¿Cómo se financia este banco y qué límites tiene para invertir en América Latina? 

El Banco Europeo de Inversiones (BEI) funciona como otros bancos multilaterales, como el BID o el Banco Mundial. Eso quiere decir que nos fondeamos emitiendo bonos y tenemos precios excelentes porque no tenemos ánimo de lucro, lo que nos permite ofrecer precios muy competitivos. En principio, no tenemos límites, pero como banco europeo, el 90% de nuestra actividad es dentro de la Unión Europea. El año pasado, dimos un importe de 78 mil millones de euros. El 90% en Europa y el resto fuera. En América Latina, en el pasado, concedimos préstamos de 560 millones de euros por año en seis proyectos. Eso lo queremos incrementar a 1000 millones por año, en 10 proyectos más o menos. Vamos a invertir en proyectos que tengan el sello de acción climática.

¿Eso qué significa? 

Son proyectos como el tratamiento de aguas residuales, que hacen gestión de residuos sólidos y el transporte sostenible. Acabamos de firmar contrato para el Metro de Bogotá y un ferrocarril. Lo que no financiamos son carreteras. La idea es quitar automóviles de la calle para que se utilicen transportes sostenibles y eléctricos. Lo que estamos viendo en varios países y en el Perú es el tema de saneamiento, agua y transporte.

¿Financian proyectos privados también?

Todo. Para nosotros, lo importante es que el proyecto sea elegible y lo podemos canalizar mediante un préstamo al Estado, a municipios o a empresas privadas. El año pasado hicimos un préstamo grande en el Perú para un proyecto de Enel en energías renovables. Muchas veces, si hay proyectos pequeños elegibles, utilizamos la banca comercial o la banca de promoción, prestamos 100 millones o 50 millones (de euros) y el banco, como intermediario, presta a los proyectos pequeños.

Cada año están viendo incrementar lo que destinan a América Latina. ¿No les preocupan los problemas financieros en la región?

Nosotros tenemos el objetivo de promover la política europea, y la Unión Europea busca enfatizar cada vez más su acción exterior en el tema del medio ambiente. Para eso no necesitamos un componente europeo en la inversión, podemos prestar aunque no haya una empresa europea directamente involucrada. La lucha contra el cambio climático es razón suficiente para financiar.

¿Cómo evalúan los riesgos de estas iniciativas?

En Luxemburgo* tenemos un equipo de 400 personas, que no son banqueros, sino ingenieros y economistas. Para cada proyecto vienen dos de ellos y se sientan con el promotor de la inversión. Ellos miran la parte tecnológica, la de financiación y de medio ambiente, que se haga de manera transparente y que haya una relación costo-beneficio. La evaluación tecnológica y ambiental es muy importante para nosotros.

¿Ya han sostenido conversaciones con autoridades peruanas?

Sí, con varios ministerios. El BEI tiene muchas ganas de hacer más operaciones con el sector público en el Perú, y estamos en conversaciones para cofinanciar algunas operaciones del sector público en los temas mencionados.

¿Qué les hace definirse por un proyecto?

Nosotros nos preocupamos mucho en cómo se ha implicado a la población afectada. Es un proceso que hemos desarrollado por décadas y que los Estados que han trabajado con nosotros conocen muy bien. Por supuesto, involucrar al BEI es más trabajo, porque pedimos más información que otros no piden, pero es también un sello de calidad porque vemos cosas que la banca comercial no mira; fuera de eso, la financiación del BEI es más barata.

Datos

- 25 años han pasado desde sus primeras inversiones en América Latina.

- 25 millones de euros es lo mínimo que el BEI ofrece en crédito directo.

Sobre Arnd Beck

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(*) Una versión previa de este artículo aludía erróneamente a Estrasburgo como sede del BEI.