En el marco de las facultades legislativas otorgadas por el Congreso de la República, el Gobierno incluyó en la ley del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) a los casinos, máquinas tragamonedas y apuestas. Debido a las externalidades negativas que genera (ludopatía en situaciones extremas), el Gobierno dispuso que estas actividades, incluyendo los sorteos y las apuestas hípicas, sean gravadas con este impuesto calculado en base a sus ingresos mensuales netos; es decir, después restar los costos de los premios concedidos.
“Tratándose de juegos de casino y máquinas tragamonedas, el Impuesto se determina aplicando un monto fijo por cada mesa de juegos de casino y por cada máquina tragamonedas, respectivamente, que se encuentren en explotación”, se indica en la norma, que entrará en vigor desde el 1 de enero de 2019.
El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) detalló en una nota de prensa que a los casinos y máquinas tragamonedas se les aplicará un sistema específico de soles por mesa de casino o soles por maquina tragamonedas. Explicaron que a nivel internacional, esta actividad no se permite o se encuentra fuertemente regulada, gravándola con un impuesto a la actividad más un Impuesto al Consumo (IGV o ISC).