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A pesar de que el Perú es uno de los pocos países cuya economía ha crecido a diferencia de sus vecinos en América Latina -según reportes del -, su dependencia del precio de los minerales todavía puede complicarle el escenario en lo que resta del año.

Hace unos días, la presidenta de la Reserva Federal (FED) de Estados Unidos, Janet Yellen, dejó entrever que, dado el ritmo de crecimiento económico de Estados Unidos, pronto podría ordenarse un aumento de las tasas de interés en dicho país.

De inmediato, las expectativas de los economistas pasaron de un posible aumento en setiembre a un 30% de posibilidades de que la FED suba su tasa en junio y un 50% de que ocurra en julio.

REPERCUSIÓN. La importancia de esta decisión radica, de acuerdo con Alexis Osses, gerente de estudios de xDirect, en que el dólar se apreciaría a nivel mundial y ello traería consigo una baja en el precio de las materias primas en general.

“Lo vimos en enero y febrero, donde toda la especulación de la reserva federal afectó los commodities. Vimos caer el precio del cobre por debajo de los dos dólares, el barril del petróleo llegando a los 26 dólares, su precio históricamente más bajo incluso desde antes del año 2000”, detalla.

MEDIDAS. El contexto de esta decisión podría pegar con dureza teniendo en cuenta que la economía china todavía no se ha recuperado.

Para mitigar el impacto, una de las opciones que tendría el Banco Central de Reserva (BCRP) sería subir la tasa de referencia inflacionaria, pero eso generaría un impacto negativo en el estímulo hacia el consumo.

“Puede darse que el BCRP en este caso salga a vender dólares como lo ha venido haciendo hasta ahora. Frenó la venta de dólares porque vio que el precio del dólar a nivel internacional se fue depreciando, pero efectivamente si vemos un tercer trimestre en el cual el dólar vuelve a recuperar un escenario alcista, el BCRP tendría que salir nuevamente a vender dólares”, comentó.

Mes clave

Reuniones de junio son vitales para definir situación del petróleo (OPEP), el dólar (FED), el yen (Banco de Japón) y el mercado de la Unión Europea (Brexit).