Luego de un avance estimado de 32.7% en el 2021, el crecimiento de las exportaciones peruanas se desacelerará hasta 5%, sumando U$S 57,500 millones; sin embargo, esta cifra representará un nuevo récord histórico, estimó la Asociación de Exportadores (ADEX).
La desaceleración se explicará por la moderación de la evolución del precio de los commodities, la crisis logística internacional, el entorno de inestabilidad política y social (conflictos mineros) que frenan el normal desarrollo de los proyectos de inversión; y las posibles nuevas olas de contagios que restringirían el comercio internacional.
“Las proyecciones se mantienen moderadas y cautas ante un escenario interno de inestabilidad política e inicio de nuevas olas de contagios por el COVID-19. Todo ello en un contexto en donde la Organización Mundial del Comercio (OMC) proyectó, en su último informe, un crecimiento mesurado de 4.7% del comercio mundial para este 2022″, manifestó el director del Centro de Investigación de Economía y Negocios Globales CIEN-ADEX, Edgar Vásquez.
Agregó que en el 2022 todos los sectores mostrarán un comportamiento positivo. Tomando en cuenta la evolución histórica 2012-2021, los más destacados serían la agroindustria y el químico.
Según Vásquez, a fin de que la recuperación sea sostenible en el mediano y largo plazo, se requiere preservar y aprovechar los acuerdos comerciales, impulsar medidas sectoriales, promover incentivos a la generación de valor agregado, un clima que favorezca las inversiones y mejoras sustanciales en la competitividad del país.
Exportaciones tradicionales y no tradicionales
Los despachos tradicionales ascenderían este 2022 a poco más de U$S 40,000 millones (subida de 3.7%), sustentado en un incremento moderado de los minerales (3.6%), la normalización de la producción minera tras su paralización por los conflictos sociales y el inicio de operación de Quellaveco (cobre).
La agricultura tradicional (9.8%) se explicaría en la mejor cotización internacional del café arábiga (9.6%) y el azúcar (6.6%). Cabe recordar que el repunte de la cotización de este grano desde fines del año pasado se debe a una menor producción en Brasil (principal productor cafetalero del mundo) ante la presencia de sequías.
Por su parte, las mayores exportaciones de hidrocarburos (1.2%) se basan en la alta cotización del petróleo y sus derivados, pues según el Banco Mundial (BM) pasaría de US$ 70 a US$ 74 por barril, aunado a un contexto de normalización de la producción nacional de hidrocarburos.
El alza de 5.2% de los envíos pesqueros tradicionales se debe a la cotización de harina de pescado –se incrementará en 2.3% según el FMI– y por los mayores volúmenes debido a las condiciones climáticas favorables y óptimos niveles de biomasa de anchoveta en el litoral peruano.
Respecto a los despachos no tradicionales, también lograrían un nuevo récord histórico con casi U$S 17,500 millones (evolución de 8.4%), por el dinamismo de la agroindustria ante la creciente demanda externa de superfoods como uvas, paltas, mangos, espárragos, bananas, arándanos y quinua, y por los mejores precios proyectados en alimentos y bebidas, que crecerán 2.1% según el FMI.
“Todos los sectores no tradicionales serán favorecidos por el crecimiento del PBI de sus principales mercados, como EE.UU. (5.2%), América Latina (2%) y la Unión Europea (4.4%), de acuerdo a lo estimado por el FMI”, precisó Vásquez.