A pocos días en el que el Ministerio de Economía dará a conocer los detalles sobre su intervención en el rescate de Petroperú, Fitch Ratings bajó las calificaciones de incumplimiento de emisor en moneda local y extranjera de largo plazo de Petroperú, de BB+ a B+.
La perspectiva de calificación de la empresa sigue siendo negativa, agrega Fitch. La rebaja hará que los créditos que pretenda tomar la estatal sean cada vez más caros.
El lunes pasado, el ministro de Economía, Alex Contreras, adelantó que este viernes, máximo la próxima semana, se conocerán los detalles de la intervención que tendrá su cartera para sacar de la crisis financiera por la que atraviesa la petrolera estatal.
Según S&P Global, “la carga total de deuda (de la petrolera estatal) era de alrededor de $6.000 millones al 31 de marzo de 2023 (y potencialmente se acerca a los US$7.000 millones al cierre del año)”.
Indecopi. Según el ex presidente de la empresa, César Gutiérrez, Fitch, al señalar que la situación de Petroperú es por falta de apoyo gubernamental, le indica al Gobierno que debe darle plata. “Es una rebaja fuerte”, afirmó.
En ese sentido, dijo insistir en que se debe pedir la insolvencia de la empresa, en tanto debe estar administrada por un nuevo directorio, compuesto por personas más creíbles. “Se debe cambiar todo el directorio para dar confianza a la comunidad financiera”, comentó.
Explicó que el proceso de insolvencia demora porque se tiene que presentar un plan de reestructuración creíble para los acreedores, quienes deben aprobarlo y luego el Indecopi debe dar su conformidad.
“El proceso de insolvencia implica presentar un plan de reestructuración creíble para los acreedores (importadores o brookers de combustibles y crudo para la refinería de Talara, así como la Compañía Española de Seguros de Créditos a la Exportación (CESCE). Puede tomar entre 8 y 12 meses”, manifestó a Correo.
El mayor problema de la petrolera es la falta de capital para pagar a los proveedores de combustibles y crudo.