Tras diversas facetas en su vida profesional, Javier Falcón logró encontrar su pasión: la fotografía. Junto a los cuadros que decoran la sala de su casa, aún conserva su primera fotografía en un pequeño marco. Si a los 20 años estuvo por una pequeña temporada bajo los flashes como modelo, ahora es él quien enfoca la cámara para catálogos de moda y revistas internacionales.
¿Cómo inicia tu relación con la fotografía?
Mi mamá tenía una cámara analógica y en algún momento yo también comencé a utilizarla, pero no sabía que me iba a dedicar a ello. Cuando estudié Publicidad y llevé mi primer curso de fotografía decidí que iba a ser fotógrafo.
¿Por qué demoraste en encontrar tu vocación?
Yo estuve buscando durante muchos años a qué dedicarme, porque sabía que luego pasaría muchas horas al día en eso y temía que mi trabajo no me gustara. Pasaron más de diez años, varios cambios de carrera y trabajo. Además, dejé la universidad por un lapso de siete años.
¿Nunca hubo presión por parte de tus padres?
No, yo pagué mis estudios desde el inicio. Aunque siempre estaba la preocupación de mis padres al sentir que no estaba yendo por el camino correcto.
Cuando decides estudiar Audiovisuales, ¿ya tenías pensado incursionar en el rubro de la moda?
Yo me tracé un plan porque tenía que recuperar el tiempo, pero no sabía a qué rama de la fotografía dedicarme. Probé con fotoperiodismo e hice prácticas semanales en dos diarios, pero quise seguir. Siempre me gustó la moda, pero desconocía toda la dimensión detrás de las fotografías de los afiches o revistas. Con esa curiosidad busqué trabajo como asistente de fotografía.
¿Qué experiencias encontraste ahí?
Logré meterme en ese circuito internacional. Cuando venían fotógrafos extranjeros al Perú para hacer trabajo de moda, yo estaba ahí: era el asistente. Cinco años trabajé con los mejores fotógrafos para revistas como Vogue Brasil. Así tuve la oportunidad de asistir a Mario Testino en la edición de setiembre, que marca la tendencia en la moda.
¿Cuándo despega tu carrera como fotógrafo de moda?
Tres años atrás ya sabía bien lo que hacía. Tenía información técnica y había trabajado con profesionales de primera. Y llegó Franco Noriega, el naked chef, a Lima. Le hice fotos y se publicaron en la revista Cosas. Son lindas, unas de las que más me gustan hasta ahora. Desde entonces, no he parado de disparar.
¿Cómo se trabaja la propuesta para una fotografía de moda?
Son trabajos bien largos, tenemos reuniones seis meses antes. Por ejemplo, para una producción internacional trabajan alrededor de 200 personas y se publican 20 fotos. Es un trabajo de equipo, un directorio ve diapositivas de locaciones, modelos, y ahí armamos la propuesta. Por eso, el día de la foto ya tenemos todo claro.
¿Existen producciones de moda así de grande en el país?
La industria de la moda en el país es nueva, nosotros tenemos Fashion Week hace poco. Existen buenos diseñadores, pero recién la idea de lo que significa la moda está penetrando en la sociedad. Si bien no existe un punto de comparación con ciudades como Londres o New York, estamos creciendo.
Colaboraste con el libro Hecho en Perú, ¿qué representa para ti?
Muy emocionado, porque es una retribución a mi universidad y una experiencia nueva. Mi profesora de semiótica comentó mis fotos en la presentación del libro. Además de eso, disfruto al ver en los paneles mis fotografías. En el trabajo comercial no hay créditos, solamente lo saben tus amigos y tú.
Mucha gente cree que el mundo de la moda es frívolo...
La gente que yo conozco no es frívola, es muy inteligente, con una aspiración a la estética más alta. Para mí, la moda es el diseño, la forma, el color, composición y expresar en una foto una historia. Las revistas de moda retratan un estilo de vida.
¿Qué proyectos te esperan?
Voy a dirigir un videoclip de un cover de un rockero muy conocido. Comenzar a dirigir videos es algo que siempre he deseado y lo he realizado en paralelo.
DATO
Javier Falcón. Fotógrafo de moda. Bachiller en Ciencias y Artes de la Comunicación de la PUCP. Inició su carrera como asistente de fotografía. Actualmente realiza trabajos para revistas internacionales y catálogos de moda.
3 veces en este año ha colaborado con Vogue Latinoamérica.
10 años pasaron para que encontrará su pasión por la moda.