Con el Protocolo Adicional de la Alianza del Pacífico (AP), que entró en vigencia el 1 de mayo, se eliminan por completo los aranceles para el 92% de los productos comercializados entre los países miembros del bloque, pero esta no es la única ventaja.
Actualmente, México y Chile son los que tienen más exportaciones hacia los otros países de la AP, y les siguen Colombia y Perú con apenas 4% (del total del comercio nacional). Aunque el volumen de exportaciones todavía es reducido, la posibilidad de negociar en bloque es igualmente atractiva para todos los países miembros.
“Si se ve en términos de exportaciones e importaciones, el Perú está un poco a la zaga, pero lo que tenemos que hacer es verlo más como un acuerdo integral, de personas, servicios y capitales”, afirmó Jaime Dupuy, gerente de Estudios Económicos y Consultoría Empresarial de ComexPerú.
EN BLOQUES. Lo cierto es que los cuatro países participantes concentran el 39% del Producto Bruto Interno (PBI) de América Latina y el Caribe, además de conformar un mercado de 217 millones de personas. Estas cifras convierten a la Alianza del Pacífico en la octava economía exportadora del mundo.
Generalmente, al negociar acuerdos comerciales con otros países, se establecen reglas, y una de ellas en este caso es la acumulación de origen. Para Dupuy, esta regla consiste, por ejemplo, en que si un producto peruano importa insumos de México, no pierde su condición de peruano al pasar por Chile. “Eso va a generar en el mediano plazo políticas de integración productiva”, refirió.
EMPRESARIOS. Mientras tanto, Mario Illescas, gerente general de la Asociación de Exportadores y Manufacturas (Asexma Chile) aseguró a su paso por Lima que las pymes de Chile y Perú se beneficiarían especialmente en sectores de manufactura como la cosmética, metalmecánica o la industria del plástico. También señaló que las mayores oportunidades están en los encadenamientos productivos para vender en mercados más sofisticados. “La visión debería ser desarrollar manufactura avanzada y pensando en todo el potencial que podemos tener en conjunto. En minería, creo que lo hemos probado”, afirmó teniendo en cuenta este rubro.
PROYECCIÓN. A futuro, Illescas consideró que es importante aprovechar la homogeneidad que existe entre los cuatro países en términos de desarrollo empresarial. “Nuestra expectativa es que se va a mejorar el intercambio y la calidad de los negocios que se generarán. El tiempo que esto tome lo va a determinar el dinamismo de nuestros empresarios para reaccionar ante esta oportunidad”, indicó.
CIFRA
64% de las exportaciones peruanas a la AP fueron productos no tradicionales en 2015.