La empresa Pluspetrol Norte (PPN) -que opera el Lote 8- advirtió que sus recursos económicos se están agotando, luego de dos años de iniciar su proceso de liquidación, y con ello se pone en riesgo la zona de explotación.
A través de un comunicado, PPN recordó que en el 2020 se vio obligada a iniciar su proceso de liquidación ante la insistencia de la OEFA de exigirle asumir pasivos ambientales dejados por las compañías que operaron en el mismo sector con anterioridad a su llegada.
En esa línea, la compañía sostuvo que respondió por todos los pasivos causados durante su tiempo de operación (incluyendo por actos vandálicos) y pagó todas las multas exigibles que se le han impuesto (US$ 40 millones, incluyendo las que correspondían al intento de obligarle a cargar con pasivos ajenos).
Además, indicó que cuando entró en el proceso de liquidación, en diciembre de 2020, dejó US$ 63 millones en caja y US$ 15 millones en barriles de crudo para garantizar el cumplimiento de todas sus obligaciones con trabajadores, proveedores y comunidades.
Agregó que, desde el 2013, aportó US$ 32 millones a las comunidades nativas a través de convenios, acciones cívicas y labores comunitarias, y pagó más de S/ 14 millones por derechos de servidumbre en favor de las mencionadas poblaciones.
“Sin embargo, casi dos años después de su anuncio de liquidación, esos recursos se están terminando, lo que pone en riesgo el Lote 8″, refirió PPN.
No extraen crudo
La petrolera también comentó que no extrae crudo desde abril de 2020 y que en el oleoducto se hallan detenidos 34,700 barriles desde la toma del Lote 8 (junio de 2021), además de los 164,500 que se mantienen en los tanques listos para su comercialización.
“Como lo ha venido repitiendo la empresa sucesivamente, este petróleo en los ductos es una bomba de tiempo que podría producir un desastre ecológico de grandes dimensiones en cualquier momento. En lo que va del año se han reportado tres actos vandálicos, que han afectado aproximadamente 20,000²”, precisó .
En ese sentido, PPN en liquidación expresó su preocupación por la situación de vulnerabilidad en la que quedarán las comunidades al no haber operador en el Lote 8.
“También es alarmante el riesgo medioambiental que corre la zona al encontrarse detenidos miles de barriles de petróleo en el oleoducto”, acotó.