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Imagine que tiene un apuro económico terrible. No tiene efectivo a disposición pero tiene un reloj de lujo, una joya familiar o un equipo tecnológico que podría dejar de ver por un tiempo con tal de recibir el dinero que necesita, es allí que puede valerse de una casa de empeño.

El empeño es una forma de recibir dinero de forma inmediata, al dejar una "prenda" como depósito y garantía de que el dinero prestado se devolverá en el plazo acordado. Este periodo de tiempo es denominado el "refrendo" y puede tratarse de un mes o solo de días. Pueden empeñarse distintos tipos de prendas consideradas valiosas y de procedencia legal.

Evaluación y condiciones

Una vez que haya escogido algo que podría interesarle a la casa de empeño, llévelo para una tasación. Si aceptas el precio que te dicen, se cierra el trato.

Hay que señalar que algunos artículos tecnológicos que están próximos a quedar fuera de uso no tienen muy buen recibimiento en las casas de empeño. Una televisión analógica, por ejemplo, puede ser abandonada fácilmente por su dueño y lograr venderlo no será nada sencillo.

Aunque cada casa de empeño tiene diferentes condiciones, la mayoría presta a plazo de un mes y si los dueños se demoran se les cobra una mora que básicamente cubre solo los intereses y una penalidad.

De no pagar a tiempo, otro riesgo que se corre es que la casa se quede con la prenda, así sea una joya o un automóvil. Para evitarlo, la mayoría de casas aceptar renegociar el trato por otros 30 días más o ajustar el plazo.