Rosanna Ramos-Velita: “Los microcréditos ayudan a salir de la pobreza”
Rosanna Ramos-Velita: “Los microcréditos ayudan a salir de la pobreza”

Rosanna Ramos-Velita tiene la escuela de Muhammad Yunus, premio Nobel de la Paz 2006, conocido como el “banquero de los pobres” porque fue el gestor de los microcréditos en Bangladesh, donde ayudó, principalmente, a mujeres a salir de la pobreza extrema. La experiencia ganada en el mundo de las finanzas, en Nueva York, donde se formó y actualmente vive, la hizo apostar por la Caja Rural Los Andes, con sede en Puno, desde donde busca extender sus operaciones a toda la zona rural del país para convertirla en el primer banco rural del Perú. Desde julio de este año fue nombrada presidenta del directorio ejecutivo de Wharton School para Latinoamérica, la escuela de negocios de la Universidad de Pensilvania.

¿Cómo hace para vivir en Nueva York y dirigir una caja rural en el país? 

Soy de Ica, estudié en Perú y en los Estados Unidos. Siempre vengo al Perú. Mi carrera inicial es Ingeniería Electrónica; hice un máster en microelectrónica. Hice un MBA doble, de finanzas y negocios internacionales, en Wharton, y desde allí tuve la oportunidad de trabajar en Wall Street. Allí conocí a Muhammad Yunus, el llamado “banquero de los pobres”; lo conozco de hace 15 años, es de Bangladesh, un lugar muy pobre donde empezó dando créditos de $27 para que mujeres hagan bolsas de paja. Me invitó a participar del directorio de su fundación, en Washington; durante 12 años trabajé con él. El doctor Yunus puso la palabra microcrédito en boca de los financistas del mundo. Esta experiencia me llevó plenamente a trabajar en las microfinanzas, y qué mejor que concretarlo en mi país.

¿Quiere replicar lo de Yunus en el Perú, tomando las riendas de una caja rural?

En el Perú es baja la bancarización, existe un gran potencial; los microcréditos son una gran oportunidad para incluir en el sistema financiero a los que tienen dos vaquitas o una chacrita, a los más pobres de las zonas rurales.

¿En qué se diferencia una caja rural de una municipal? 

Una caja rural es de privados; mientras que la municipal, del Estado (municipalidad). Hay menos cajas rurales, pero nosotros queremos llegar a toda la zona rural del país para dar oportunidad a mucha gente pobre. Mi familia compró caja Los Andes hace ocho años, pero hay un socio, un fondo de inversión (Creation Investment Andes LLC, accionista mayoritario).

¿Qué participación de las microfinanzas tienen las cajas rurales? 

Entre el 30 y 40%. El líder es Mibanco, luego las municipales, seguida de las rurales.

¿Tienen tasa de interés amigable? 

Se busca ser más competitivo; se maneja riesgos. Nosotros buscamos entrar a comunidades rurales con productos muy especializados, como para el engorde de ganado, producción de leche, entre otros. Se dice que los costos de los microcréditos son más altos. Llegar a zonas rurales es operativamente más costoso, pero se invierte en tecnología, se apela a los celulares; dan buen resultado. El 60% de los clientes de los Andes tiene un celular de alta gama en el que se puede portar la billetera electrónica.

¿Los microcréditos harán que se elimine el efectivo, desde el área rural hasta las ciudades? 

Creo que será así porque las soluciones tecnológicas son una gran herramienta: reducen tiempo eliminando efectivo.

Es decir, ¿está convencida de que los microcréditos pueden sacar de la pobreza a mucha gente? 

No es la única opción, pero el acceso al sistema financiero formal es vital. No solo el crédito, sino también la capacidad de ahorrar y que estén protegidos con un fondo de seguro de depósito (FSD) que esté regulado, asegurar que no haya lavado de dinero. Las microfinanzas son un motor del desarrollo, que da la oportunidad de salir de la pobreza a mucha gente. Aún hay una capa muy vulnerable que necesita oportunidad para que hagan negocios sostenibles. Además, es importante hacerles el seguimiento e inclusive buscarles mercados a los clientes.

Perfil

Rosanna Ramos-Velita, presidenta de caja rural Los Andes

Es presidenta del directorio ejecutivo de Wharton School para Latinoamérica. Fue miembro del directorio de Grameen Foundation.