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Son dos los cambios que tiene programados la Sociedad Eléctrica del Sur Oeste (SEAL). Se trata en principio del primer sistema articulado con un municipio para comenzar el cobro por Serenazgo, tal como lo establece el Decreto Legislativo 1253, emitido en diciembre del 2016.

Se trata de la Municipalidad Distrital de Chala, la cual fue la primera y, por ahora, la única comuna que ha pedido este servicio. Para el gerente de SEAL, Leonidas Zavala, esto significa modificar el sistema de cobranza institucional para acomodarlo al bando de contribuyentes (actualizado) de la comuna, es decir, verificar que coincidan nombres, domicilios y servicios.

La solicitud de la comuna de Chala llegó acompañada de reuniones que concluyen la próxima semana para finar el inicio de la cobranza. Sin embargo, para Zavala esta unión de cooperación no garantiza la retribución por el servicio de vigilancia ciudadana a las comunas.

“Puede que los usuarios de SEAL acepten solo pagar el importe por el servicio de electricidad, pero no el de Serenazgo. Nosotros no podemos negar que solo paguen el consumo, aun si se niegan a pagar por Serenazgo varios meses, no podemos suspender el servicio”, detalló. Esto significa que las municipalidades deben establecer mecanismos de comunicación con los pobladores para convencerlos sobre la importancia del servicio y, a la vez, hacer que los contribuyentes paguen.

“Es una cuestión elemental, los contribuyentes pagarán por un servicio que sí sea tangible, que puedan ver”, dijo.

MÁS CAMBIOS. Pero este no es el único reto para la SEAL. Un convenio con la KFW de Alemania, (entidad bancaria alemana) les asegura un fondo no reembolsable de 200 millones de Euros, suficientes para la realización de estudios de inversión del proyecto para el cambio de medidores del servicio eléctrico a un sistema inteligente, interconectado a internet que permitirá al usuario verificar en línea su consumo, la tarifa horaria y así determinar sus propios hábitos y consumos, para un mejor cálculo de su recibo. El financiamiento de la KFW se enmarca en un convenio para la mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero y la mejora de las condiciones del servicio de energía eléctrica, y por ende redundando en la competitividad de la entidad regional. Lo primero será la contratación de los consultores para la formulación de los planes de inversión a largo plazo y los estudios de preinversión de los proyectos a priorizar. La KFW recomienda que se lance cuanto antes las licitaciones para las consultorías.

La idea es llegar al 2025 con el cambio de los 400 mil medidos ahora a cargo de la empresa eléctrica.

“Un usuario puede ver que entre las 18:00 y 23:00 horas hay mayor consumo, por lo mismo es más alta, así puede variar algunas actividades, como planchar, por ejemplo, en horarios donde el consumo sea mejor, es decir, podrá administrar su gasto”, señaló Zavala.

Los nuevos medidores serán prorrateados en las tarifas de los usuarios en largo plazo.

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