La concesionaria Cobra negó la posibilidad de ejecutar el proyecto Majes Siguas II con el modelo formulado en el contrato del año 2010, es decir con la estructura de canal abierto para el riego de cultivos de las pampas de Siguas y condicionó la firma de la adenda 13.

“Entonces, así de claro (…) o es  la adenda, o no hay nada. Cada parte tendrá que decidir en qué situación está y cómo defiende sus intereses”, advirtió ayer (25 de noviembre) el gerente de Cobra Joaquin Roura, durante el taller que se hizo para los consejeros en el Colegio de Ingenieros.

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Propuesta de la empresa

Así,  la empresa dejó entrever que de no firmarse la adenda, solo queda el arbitraje internacional para que tanto la empresa como el Estado defienda sus intereses. Sin embargo, el gerente de la Autoridad Autónoma de Majes, Arturo Arroyo, señaló que eso significaría la  paralización del proyecto por varios años y la pérdida de inversión por 655 millones de dólares.

Roura indicó que los tres factores considerados  para el cambio tecnológico en la adenda  son el incremento  de  agua de 0.5m3 por segundo a 2.4 m3/s. Además de las pérdidas de agua por filtración u otro factor (en un 5%)  y  los cambios climáticos, lo  que sería más frecuente.

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Cambio de sistema de riego

Esta modificatoria implica la conducción y distribución del agua por tubería de fibra de vidrio reforzada 2.5 metros de diámetro, una cámara de válvula de distribución automatizada de forma digital, cámaras reductoras de presión, 6 vasos reguladores, lotes de 200 hectáreas con 198 tomas de agua.

Con este sistema, cada parcela de 200 hectáreas costaría aproximadamente 3 millones 127 mil dólares, mientras que sin la adenda el costo aproximado sería 3 millones 176 mil dólares, debido a las variaciones en varios factores, entre ellos el costo de operación y mantenimiento de la estructura hidráulica.