Son las siete de la mañana y en el pueblo de Callalli - a 3860 msnm empieza la ceremonia para agradecer a la Choqeshisha, tres puquiales sagrados que significan el origen de la vida para los moradores de la zona. Allí conocimos al párroco austriaco Franz Windischhofer, él llegó hace 17 años a la provincia de Caylloma en Arequipa, pero lleva no menos de 40 años en el Perú.
Con un castellano y quechua casi perfectos, además de un respeto y amor por las tradiciones de nuestro país, se ha convertido en pieza fundamental en la comunidad, no solo por su labor de consejero espiritual, sino por el apoyo que ha brindado a las mujeres tejedoras en el distrito para que puedan exportar sus prendas.
TERRORISMO. Su historia en el Perú contempla satisfacciones y lecciones duras que aprendió en medio del conflicto armado interno durante los años ochenta y noventa cuando era párroco de Huántar, provincia de Huari. “Dinamitaban iglesias, se mataban entre ellos, yo no entendía por qué tanto odio. Tuve que presenciar la muerte del alcalde, fue algo que me marcó. Gracias al pueblo me salvaron la vida. Fue una época que no se debe olvidar. El miedo ha sido el mejor socio para el terrorismo. La gente tenía que sobrevivir, estaban en medio de todo, venían los terroristas, venían los sinchis”, nos narra el padre Franz con ese sabor amargo que regresa con los recuerdos de este periodo de violencia.
Sin embargo, esto no fue motivo para abandonar la tierra que ya quería, la sentía suya y que de alguna manera, posteriormente, conquistó simbólicamente, al coronar por tercera vez el nevado Huascarán, un domingo 9 de agosto del 2013 a los 75 años. Una hazaña que le valió varios titulares en periódicos del país.
-
ENSEÑANZAS. Es así que la admiración por la cultura andina lo ha llevado a investigar y llevar la palabra de Dios a través de la cosmovisión andina. “Conozco las ruinas y monumentos y siempre he dicho que el lanzón monolítico, por ejemplo, es este hombre perfecto que está en equilibrio con todo, es decir, está en paz con Dios, consigo mismo y con los demás. La Biblia dirá que es el hombre a imagen y semejanza de Dios. Esto ya cristalizando la idea. La gente ha entendido que todo es un don de Dios y esto es más claro en el Dios Pichinique. Antes de que existiera el Santuario de la Virgen de Chapi, en ese lugar había un templo dedicado a este Dios y en el libro El suelo de Arequipa convertido en cielo de 1795, se habla de este deidad, cuyo nombre se traduce en “qué tienes tú, que no hayas recibido”. San Pablo dice lo mismo en la primera carta a Los Corintios. Es decir de qué te alabas si todo lo has recibido. Posteriormente, con la erupción del volcán Huaynaputina en 1600 todo se destruye y se edifica el templo a la Virgen. Es la continuidad del culto, ahora también peregrinamos para agradecer con fe y devoción, para pedir protección”, explica el párroco convencido de que las enseñanzas de Jesucristo son universales y se pueden entender teniendo como base el amor y el respeto hacia los demás.
De este modo, la catequesis que reciben los niños es muy particular. Esta preparación se basa en los principios del Ama Sua (No seas ladrón), Ama Llulla (No seas mentiroso) y Ama Quella (No seas flojo) y dos más que complementan este curso espiritual dirigido a los niños y adolescentes. Se trata de Amarrumy Soncco, que significa “no tener corazón de piedra” y un tercero “No olvidar a Dios”. De esta forma, al contextualizar el mensaje, este se hace más entendible y cercano a los pobladores de la zona, quienes muestran su agradecimiento con un saludo que convierte al distrito cercado de castillos de piedra, en su casa.
En ese sentido, el padre Franz nos explica que la iglesia de Callalli está construida sobre un puquial y atrás existe una piedra, que para los pobladores es la huaca hacia donde se peregrinaba
“Esto se relaciona con una tradición judía, cuando Moisés andaba por el desierto que el agua sale por la roca, es decir la roca caminaba con ellos y San Pablo después, en 1 Corintios que la roca es Cristo, también se lee en la Biblia que Dios siempre es la roca”, nos comenta y finaliza con un mensaje sobre la importancia de la historia y el cuidado del medio ambiente. “Todo se trata de respeto, estos rituales son para pedir permiso a la pachamama y por lo mismo también hay que cuidarla”, culmina el padre Franz con la vitalidad que lo caracteriza.
37 años vive en el Perú . Ahora es párroco de Callalli
75 años tenía Franz asciende al nevado Huascarán.
Premio. Debido a su importante labor durante los años ochenta y noventa, en el 2012 fue galardonado por la ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, quien le hizo entrega en ese entonces del “Premio por Paz 2012” en reconocimiento por su trabajo y compromiso en la construcción de una cultura de paz en el Perú.